El experto Manuel Sucín plantea un modelo productivo, con una tabla de costos, gastos generales y beneficios para los productores. 

Esta propuesta se basa en la constitución de módulos y en el rol a cumplir por las municipalidades y por otras instituciones socioproductivas. Estas podrían hacerse cargo de módulos constituidos por grupos de 20 a 500 o más productores caprinos, con el objetivo de facilitar la producción desde el punto de vista económico, técnico y de apoyo a la comercialización de los productos obtenidos.

Las pariciones naturales del ganado caprino comienzan a partir de abril y se extienden hasta julio e inclusive agosto. Por ello, es necesario dar inicio a la presente propuesta a partir de enero de cada año.

Este esquema tiene en cuenta también el rol del frigorífico de caprinos, cuyos miembros deberían asumir el compromiso de retirar a los animales en tiempo y forma (tanto a los cabritos como a los capones y a las cabras viejas) y garantizar un precio justo por peso vivo sobre culata de camión, de manera similar al accionar de los compradores privados.

Los gobiernos municipales debieran hacerse cargo de las cuencas caprinas de su ámbito de influencia. Se sugiere trabajar con los municipios de Villa Ángela, Villa Berthet, Tres Isletas, Pampa del Indio, Gancedo, Villa Río Bermejito, Campo Largo, Quitilipi, Machagai, Los Frentones, Hermoso Campo, Pampa del Infierno, Juan José Castelli, Presidencia Roque Sáenz Peña, General Pinedo, Las Breñas, Charata y San Bernardo, entre otros.

Las asociaciones, las cooperativas, el plan social agropecuario, oenegés, INTA, defensores de los caprinos podrían brindar también apoyo a los productores. Ese apoyo permitiría contar con un sostén operativo para que puedan respaldar la producción con instalaciones adecuadas; pasturas naturales o artificiales; animales de buena calidad y cantidad; mano de obra familiar calificada y agua suficiente.

Asimismo, el gobierno provincial podría ayudar económica y técnicamente, a través de los siete Centros de Desarrollo Productivo (Cedepros), a los productores de escasos recursos económicos y culturales. Para ello, en cada Cedepro deberían designarse veterinarios especializados para el asesoramiento técnico necesario. Los profesionales deben conocer los objetivos de su accionar, atender a no menos de 50 productores por Cedepro, colaborar con la Cooperativa Trento Chaqueña y con el frigorífico, a fin de contribuir a su mejora y desarrollo.

Para cumplir eficientemente con su función, es necesario que se cuente con vehículos en condiciones, con una remuneración económica acorde y con una evaluación permanente a fin de mejorar lo que es necesario cambiar. El gobierno provincial debe garantizar el control de la inversión y ejecución de lo planificado en relación al aporte económico que se conceda a los productores o asociaciones.

La Propuesta 

La propuesta consiste en reunir 420 productores caprinos en diferentes municipios o zonas de la provincia (esta cantidad puede variar en aumento o en disminución). Estos productores debieran contar con unas 63 cabras selectas y productivas (cifra que también puede aumentar o disminuir) y con reproductores Böer puros y sus cruzas con Criollos, Nubian y Angora. Todos ellos de muy buena calidad genética.

Trabajaríamos en cifras redondas, con un total de 26.500 madres productivas selectas. Se preñarían unas 25.200, se descartarían las que no se preñan, aproximadamente unas 1.300. Estas cabras deberían parir, cada 9 meses, 1,7 cabritos. Nacerían unos 42.840 cabritos aproximadamente. Si se considera una mortandad de un 10%, es decir 4.284, quedarían 38.556 cabritos.

En tanto, si en los establecimientos se consumieran aproximadamente 4082 cabritos, quedarían para la venta 34.474 cabritos, de los cuales el 50% serían hembras y el otro 50% machos. A los 60 días o más deberían venderse con unos 14 kilogramos de peso vivo o más, cada uno de estos cabritos. Con esta propuesta no se prevé incremento de stock ni reposición de hembras y machos.

Por otra parte, las madres se suplementarían por 75 días, es decir 15 días antes de parir y 60 días pos parto. Y los cabritos se suplementarían por 45 días aproximadamente.

Tratados de esta manera, los cabritos ganarían por día entre 150 a 240 gramos, si se aplicaran los siguientes cruzamientos: Böer por criollos, Nubian, Angora o Böer puros, si se logra un amamantamiento correcto, si la alimentación es la adecuada y se contara con limpieza estricta del corral, buen techado y una correcta sanidad.

Además, los cabritos se terminarían al pie de la madre; los machos no se castrarían hasta los 80 días, salvo para hacer capones que serían castrados entre 5 a 10 días de nacidos; las madres así tratadas quedarían en óptimas condiciones corporales para entrar en celo y volver a preñarse con buenos resultados; y las madres seleccionadas deben ser melliceras con dos pezones y sin prognatismo.

Las Condiciones 

Los productores deberán contar con experiencia en la cría de cabras y con deseos de capacitación; contar con buenas madres y reproductores de calidad; y los corrales deben contar con el 40% de techado, construidos en zonas altas, bien soleados, con buena higiene, desinfectados, con divisiones adecuadas para un mejor bienestar del animal y manejo. Deben tener cantidad y calidad de agua suficiente; cantidad y calidad de pasturas naturales o artificiales; y comprar los insumos en la provincia del Chaco.

De ser posible, es conveniente trabajar asociados con otros productores para intercambiar experiencias, aumentar los conocimientos y mejorar los beneficios económicos.

Por otra parte, el personal que trabaje en los corrales no debería ingresar descalzo, debería utilizar guantes en forma permanente, y trabajar con otra persona, nunca hacerlo solo. Además, se debe prohibir el ingreso de niños al corral; no tirar las vísceras de los animales faenados a los perros sin ser previamente cocinadas; construir proyectos a corto, mediano y largo plazo para saber qué hacer, cómo hacerlo y de cuándo hacer a fin de obtener óptimos resultados en la cría de caprinos. Por último, se recomienda organizar una granja integral para que, a través de la diversificación, puedan aprender nuevas tecnologías y afrontar nuevos desafíos.

Esta propuesta es flexible. Se podrían aumentar o disminuir los gramos de cereales o de balanceados, los fardos de alfalfa y rollos. Se podría aumentar el número de productores y de madres productivas o aumentar o disminuir las hectáreas de gatton panic, de alfalfa y otras pasturas.

A la venta mencionada se podría agregar la venta de capones y, en otro modelo, la venta de machos y hembras para reproducción, lo que reportaría más beneficios económicos para los productores caprinos.

Fuente: Agencias