Noticias

Biosensor Detecta en Solo una Hora Adulteraciones de Caballo en Ternera

Publicado

en

(1.183 lecturas vistas)

COMPARTIR

 

carnes_biosensor_

El fraude en los productos cárnicos se ha convertido, en los últimos años, en una batalla de la industria alimenticia y la salud pública. Aunque existen numerosas estrategias para descubrirlo, no son lo suficientemente selectivas y sensibles para diferenciar especies animales cercanas. Una colaboración de las facultades de Química y de Biología de la Universidad Complutense de Madrid ha dado como fruto el desarrollo de un biosensor electroquímico capaz de detectar, en solo una hora, procesos de adulteración de carne de ternera con carne de caballo a través de la detección de una secuencia específica de la región D-loop del ADN mitocondrial de esta especie animal sin necesidad de extraer o amplificar previamente el material genético.

La identificación de carne de caballo adulterando otras como la de ternera es posible gracias a un biosensor electroquímico desarrollado por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y que es capaz de reconocer un fragmento de ADN prácticamente invariable en los más de 4.500 genomas mitocondriales de caballo secuenciados y ausente en el resto de especies de mamíferos.

“Así, es posible la identificación selectiva y sin falsos positivos de cualquier tipo de carne de caballo, independientemente de su raza”, apunta F. Javier Gallego, investigador del departamento de Genética de la UCM.

Este biosensor es capaz de discriminar en sólo una hora y con diferencias estadísticamente significativas entre carnes de ternera sin contaminar y contaminadas solo con 0.5 % (p/p) de carne de caballo –nivel exigido por la legislación europea–.

Hasta ahora, los ensayos y estrategias para detectar estas adulteraciones cárnicas se basaban en técnicas inmunológicas, espectroscópicas o de biología molecular.

Estos métodos “no suelen ser suficientemente selectivos como para diferenciar especies animales cercanas debido a la posibilidad de reacciones cruzadas, ni suficientemente fiables en productos procesados debido a la desnaturalización y degradación de las biomoléculas (proteínas y ADN nuclear) que se producen por estos tratamientos térmicos”, justifica Susana Campuzano, investigadora del departamento de Química Analítica de la UCM y coautora del estudio publicado en Analytical Chemistry.

Mejor mitocondrial que nuclear

El equipo multidisciplinar comprobó que se obtenían mejores resultados en fragmentos de ADN mitocondrial que en el nuclear, porque el primero está más protegido y resiste mejor los posibles tratamientos térmicos.

Estos resultados son fruto de la colaboración entre las facultades de Ciencias Químicas y Ciencias Biológicas de la UCM. Mientras que el equipo de Gallego ha identificado el fragmento específico a detectar, diseñado la sonda apropiada para ello y aportado su conocimiento y experiencia en técnicas de extracción de ADN mitocondrial y de preparación de lisados mitocondriales, el del departamento de Química Analítica, liderado por José Manuel. Pingarrón, ha diseñado, combinando adecuadamente todos los elementos anteriores, un biosensor electroquímico capaz de satisfacer los requerimientos de sensibilidad y selectividad necesarias para cumplir con la legislación vigente para la detección de este tipo de adulteraciones.

“Además de trasladarse a la identificación de otros ADNs de mamíferos, podría aplicarse tanto para la detección de adulteraciones que involucren otro tipo de carne animal como con fines de cribado para identificar todas las especies animales presentes en una carne”, avanza Pingarrón.

La mayoría del trabajo experimental que ha conllevado este desarrollo ha sido realizado por el doctorando Víctor Ruiz-Valdepeñas y María Luisa Gutiérrez.

Leer más
Click para comentar

Deja un mensaje

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Noticias Internacionales

Girolando, la mejor alternativa para la producción lechera en climas cálidos

Publicado

en

COMPARTIR

Con una producción promedio de 5.000 litros de leche durante 305 días bajo el calor del clima tropical, estas terneras presentan una mayor resistencia y adaptación al entorno, lo que aumenta sus tasas de supervivencia. Estas cualidades las destacan en un país donde la cría de terneras enfrenta tasas de mortalidad de hasta el 25 %. Las terneras Girolando pueden producir en promedio 5.000 litros de leche durante 305 días en climas cálidos. Fotos: Felipe Argoty, magíster en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia sede Palmira.

En Colombia la producción lechera afronta una crisis marcada por los altos costos tanto de los insumos importados utilizados por la industria como de los alimentos concentrados para el ganado, además de factores como la tendencia al bajo consumo en el mercado y el encarecimiento de las tierras en zonas tradicionales de ganadería, entre otros, situación que ha obligado a los productores a buscar nuevas alternativas que permitan mantener la rentabilidad del negocio y reducir las pérdidas.

Foto. La cría de terneras enfrenta tasas de mortalidad de hasta el 25 %

Cerca del 80 % de la producción de leche proviene de animales con composición genuina en su genética, escenario en el que resaltan las terneras Girolando, una raza que toma y supera lo mejor del cruzamiento entre la productividad de la Holstein y la rusticidad de la Gyr, lo que les permite adaptarse a altas temperaturas, ser más tolerantes a parásitos y poderse pastorear en condiciones adversas, características que las convierten en la mejor opción para climas tropicales como los de Tolima, Valle del Cauca, Magdalena Medio y los Llanos Orientales y la Costa Caribe, en donde han demostrado un rendimiento superior.

En la industria lechera la etapa más crítica es la cría de las terneras, ya que es cuando los animales dependen de una adecuada alimentación y cuidados especiales para asegurar su supervivencia y óptimo desarrollo. Además de ser costosa, esta fase se asocia con altos índices de mortalidad, en particular por problemas de nutrición.

Ante este problema, durante su Maestría en Ciencias Agrarias en la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira, el zootecnista Luis Felipe Argoty López evaluó mediante tres experimentos alternativas para mejorar la rentabilidad durante la cría, con dietas menos costosas pero con el aporte nutricional necesario para evitar problemas de crecimiento y desarrollo, clave en la crianza de reemplazo, cuando preparan a las terneras para que se conviertan en futuras vacas lecheras que renueven el hato y mantengan la productividad del sistema.

Foto. En Colombia cerca del 50 % de la producción de leche proviene de cruces de toros y cebús.

El Estudio

En la investigación se analizó el crecimiento y desarrollo ruminal (ingesta de alimento sólido) de 19 terneras Girolando F1 con edades entre 14 y 22 meses, en el corregimiento de Santa Rosa de Tapias, municipio de Guacarí (Valle del Cauca).

Para el trabajo se hicieron 3 grupos de animales con sendos tratamientos. A los del primer grupo (grupo control) se le suministraron 4 litros de leche al día, repartidas en dos tomas, y concentrado comercial; al segundo, 4 L de leche distribuidos en tres tomas, más consumo de alimento experimental; y al tercer grupo, 4 L de leche distribuidos en tres tomas, más consumo de alimento comercial. A todos los tratamientos se les suministró pasto pangola y agua a voluntad.

Sobre el alimento experimental, el investigador explica que “hicimos ajustes dentro de la proteína, la pusimos un poco más disponible dentro de la dieta de las terneras, usamos soya, maíz, algunos cereales, premezclas, un promotor de crecimiento ruminal y lo que utilizan todos los alimentos concentrados, porque el reto era hacer un concentrado experimental similar en composición al comercial, pero con algunas mejoras”.

Foto. El estudio se realizó con 19 terneras en el corregimiento de Santa Rosa de Tapias (Valle del Cauca)

También recolectó muestras de sangre cada 15 días, para analizar metabolitos como proteína, albúmina, globulinas, calcio, betahidroxibutirato (BHB) y cortisol. Así mismo evaluó parámetros biométricos como edad, peso, circunferencia, altura, ganancia de peso, consumo promedio y conversión alimenticia. Cada variable evaluada se analizó estadísticamente a través de un modelo mixto de medidas repetidas.

Aunque en la ganancia de peso los resultados no arrojaron diferencias significativas entre los tratamientos, entre muestreo sí las hubo y se evidenció que la edad de los animales influye en la concentración de proteínas en la sangre y que el BHB permite conocer indirectamente el desarrollo ruminal.

También se evidenció que “la edad de los animales influye en la concentración de proteínas en la sangre y que el BHB permite conocer indirectamente el desarrollo ruminal”.

Foto. Con la raza Girolando se puede obtener una producción lechera más competitiva y menos dependiente de razas europeas

El investigador destaca que, “este indicador sugiere que las terneras están desarrollando su rumen de forma óptima, lo cual es esencial para una digestión eficiente, y en última instancia para su futura capacidad de producir leche”.

También se registraron bajos niveles de cortisol en la sangre, una hormona que se libera en respuesta al estrés y puede afectar el crecimiento y la salud general del animal. Altos niveles de este indican que las terneras están experimentando estrés, lo que puede influir negativamente en su sistema inmunológico y reducir su capacidad de aprovechar nutrientes, afectando el desarrollo del rumen y la futura producción de leche.

“Si logramos que más productores opten por razas como la Girolando, tendríamos una producción lechera más competitiva y menos dependiente de razas europeas, cuya adaptación a nuestras condiciones es limitada”, anota el magíster.

Leer más

Noticias Nacionales

Bolsa de Trabajo: Especialista en Control de Calidad de Productos Lácteos

Publicado

en

COMPARTIR

Leer más

Noticias Nacionales

Realizaron Chaccu de Vicuñas en la sierra de Tacna

Publicado

en

COMPARTIR

Dirección Regional de Agricultura Tacna (DRAT) supervisó la realización de la técnica del ‘Chaccu’ por parte de la ‘Asociación del Comité de Manejo de Vicuñas Mamuta Sur’, gracias a la cual se obtuvo 25.73 kilos de fibra tras esquilar 113 vicuñas. Lo recolectado se podrá comercializar a nivel nacional e internacional, y representará ganancias a la población de la zona alto andina.

El ‘Chaccu’ es una actividad ancestral que consiste en cercar temporalmente a un grupo grande de vicuñas para luego esquilarlas, recolectando su fibra. Esta fiesta  en donde participan las comunidades colindantes a las zonas donde habitan estos camélidos silvestres se realiza en los meses de octubre y noviembre en las comunidades de Alto Perú, Pampahuyuni, Mamuta y Kallapuma (departamento de Tacna al sur del Perú), donde existen poblaciones de esta especie que son aprovechadas a través de un manejo sostenible.

De la actividad, también participaron el Servicio Nacional Forestal (Serfor) y el Servicio Nacional de Sanidad Agraria del Perú (SENASA), quienes brindaron soporte en el diagnóstico y tratamiento sanitario de las vicuñas.

De esta manera, la Dirección Regional de Agricultura de Tacna (DRAT) sigue brindando apoyo al sector agrario de nuestra región.

Leer más

Tendencia