El gigante asiático está ampliando aceleradamente el número de granjas y sobre fomentando la proliferación de establos lecheros de gran envergadura.

La leche de vaca se ha convertido en uno de los objetivos estratégicos para las autoridades chinas en sus planes económicos a medio y largo plazo. Eso ayudará a las regiones que producen alfalfa, que encontrarán así un cliente potencial cada vez mayor. Pero también puede suponer la irrupción de un competidor mundial en el sector lácteo. Hoy por hoy, es deficitario en esta producción. Es decir, consume más de lo que produce.

En el futuro, si se cumplen sus planes, los flujos comerciales del sector lácteo mundial podrían experimentar cambios relevantes. Entre otras cosas, porque el aumento de la producción propia podría obligar a quienes exportan actualmente lácteos a China a buscar otros mercados, aumentando la competencia en este sector en otras áreas. Europa se cuenta entre las áreas excedentarias.

Aragón, que concentra el 25% de la producción europea de alfalfa, lo ve con buenos ojos. Por eso, las autoridades del Gobierno aragonés han valorado el acuerdo recientemente firmado entre España y China, por el que 24 empresas productoras de alfalfa transformada –la mitad aragonesas– han quedado autorizadas a exportar al gigante asiático.

Según ha destacado el Ejecutivo aragonés, el Gobierno chino se ha propuesto «pasar de 1,7 millones de vacas de leche de alta genética en granjasde más de 1.000 cabezas, a un censo de 5 millones en el año 2020».

Diversos organismos y expertos internacionales no creen, sin embargo, que eso se traduzca realmente en triplicar la producción. Entre otras cosas, porque parte de las nuevas granjas vendrán a sustituir pequeñas explotaciones. En cualquier caso, las opiniones y estimaciones al respecto son variadas.

De todas formas, lo que se da por hecho es que el incremento será muy significativo. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos calculaba que en el año 2008 China tenía 126 millones de vacas lecheras y que en apenas tres años la cifra iba a aumentar hasta los 140 millones.

Por su parte, la organización de Naciones Unidas para la Alimentación, FAO, calcula que China incrementará en diez años su producción lechera en más de un 50%. De las alrededor de 45.000 toneladas que produjo en el año 2012, la FAO calcula que pasará a unas 70.000 toneladas en el año 2022.

India, la Unión Europea y Estados Unidos son, por ese orden, los tres principales productores lácteos del mundo. La cuarta posición la ocupa China, en plena expansión también en este sector.