Nutricionista afirma que si la lactosa se elimina radicalmente de la dieta, el organismo humano podría perder la capacidad de producir la enzima “lactasa”, la responsable de la asimilación de la lactosa. La intolerancia a la lactosa se manifiesta con molestias como dolor abdominal, náuseas e hinchazón, si después de consumir leche no se padece de estas molestias, debe ingerirse la leche con su contenido natural de lactosa.
El organismo humano no debe perder la capacidad de digerir la lactosa (azúcar natural de la leche), ya que actúa principalmente como fuente de energía, además de tener un efecto favorable en la absorción del calcio, afirmó Marinalva Santos, nutricionista de Nutrazone.
“La ingesta de lactosa estimula la secreción de la enzima lactasa, la responsable de transformar a la lactosa en sus unidades más pequeñas (glucosa y galactosa). Por eso es que las sociedades nórdicas, en donde desde épocas inmemoriales se empezó a consumir leche de vaca (mucho antes que en Sudamérica y Asia), el problema de intolerancia a la lactosa es poco frecuente, pues están acostumbrados al consumo de alimentos que contienen lactosa, como la leche”, explicó.
“Es preciso recomendar que sigamos consumiendo aún una reducida cantidad de lactosa a fin de que en nuestro organismo se continúe estimulando la producción de la enzima “lactasa”, de tal forma que la intolerancia a la lactosa no llegue a ser un problema genético para las futuras generaciones.” precisó.
Intolerancia y sus Niveles
Pero, ¿Cómo una persona puede saber si es intolerante a la lactosa y en qué medida?
Si luego de consumir leche no sentimos ninguna “molestia”, es porque nuestro cuerpo produce la suficiente cantidad de enzima lactasa para digerir la lactosa, sin embargo una persona puede considerarse como intolerante a la lactosa, si luego de consumir leche comienza a sentir molestias como dolor abdominal, náuseas, hinchazón y gases. – Explica Marinalva Santos.- Organismos internacionales como la European Food Safety Authority (EFSA) indican que las personas con intolerancia a la lactosa pueden tolerar hasta 12 gramos de lactosa sin la manifestación de síntomas, es decir pueden tolerar hasta 1 vaso de leche por momento de consumo. Entonces ¿Por qué la mayoría de personas con intolerancia a la lactosa solo deberían consumir leche sin lactosa?, en ese sentido, si la preocupación son los “malestares” de la intolerancia a la lactosa, un producto reducido en lactosa sería perfecto, de tal forma que se pueda seguir aprovechando de los beneficios de la leche y de la lactosa (como fuente de energía y favorable en la absorción del calcio), sin causar molestias. Obviamente que las pocas personas que son absolutamente intolerantes a la lactosa deberían de consumir leche sin lactosa.
Se sabe que cuando uno se queda mucho tiempo sin tomar leche (con su aporte natural de lactosa), se corre el peligro de que la enzima lactasa pueda “desaparecer”, hasta el punto de que el organismo no tolere el consumo de otros alimentos lácteos (yogurt, quesos, etc.) los cuales requieren lactasa para ser procesados.
Para la especialista, el problema de intolerancia a la lactosa surge cuando la persona tiene como principal síntoma el dolor abdominal, el cual no solo puede ser causado por el consumo de leche sino por la ingesta de algunas menestras, fármacos, entre otros y piensa equivocadamente que la leche es el problema. Por ello resulta importante identificar claramente la fuente del malestar.