El Departamento de Nutrición Animal de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro de México (UAAAN), campus Saltillo, diseña una alternativa estratégica para incrementar la rentabilidad de hatos lecheros en zonas de intenso calor, como la Comarca Lagunera de Coahuila y Durango.
“La alternativa es que las vacas lecheras se ordeñen por periodos mucho más prolongados que los típicos 300 días que se utilizan en los países desarrollados en zonas templadas y, particularmente, que nuestra vaca lechera se ordeñe durante 600 días, por lo menos, y también tenemos experiencia de vacas que pueden producir leche durante 900 días. Con esta alternativa le damos al ganadero la posibilidad de que la vaca le produzca mucho mayor cantidad de leche”, explicó respecto a la estrategia alternativa el doctor Miguel Mellado Bosque, profesor investigador del Departamento de Nutrición Animal de la UAAAN y miembro nivel III del Sistema Nacional de Investigadores (SNI).
La información técnica del proyecto indica que una alternativa para los productores de zonas de intenso calor —como la Comarca Lagunera— es prolongar la lactancia de las vacas más allá del tradicional periodo de 10 meses, teniendo como meta ordeñar las vacas hasta por 20 meses, incluso hay vacas que pueden ordeñarse hasta por 30 meses con niveles de producción rentables de al menos 25 litros de leche por día. Para lograr lo anterior se requiere incrementar el número de ordeñas por día —tres en lugar de dos— y posponer la primera inseminación de las vacas hasta los 200 días posparto.
“Es una estrategia de ordeña de las vacas y manejo reproductivo de las mismas que permite que la vaca sea mucho más rentable para el productor, que se presente una mayor producción de leche a través del año, una estabilidad más prolongada en la producción de leche y una mayor calidad de vida de la vaca”, detalló Mellado Bosque sobre la innovación de la estrategia.
Producción al Doble
De acuerdo con el investigador, la metodología empleada fue hacer comparaciones entre grupos de vacas con tres ordeñas. Se hicieron comparaciones de un grupo testigo o control, en donde las vacas fueron inseminadas y quedaron preñadas alrededor de los 120 días después del parto, con la consecuente lactancia de 10 meses. Este grupo se contrasta con otras vacas que no se inseminaron hasta pasados los 150 o 200 días posparto y un tercer grupo donde las vacas no se inseminaron hasta que pasaron los 250 o 300 días posparto.
Según información técnica de la investigación, esto permitió que la gestación no interfiriera con la producción de leche y de esta forma conocer que tanto la gestación iniciada en el primer tercio de la lactancia afecta la producción de leche, y que si la vaca no es preñada poco después del parto, la lactancia se puede prolongar de forma sustancial. El resultado obtenido son vacas con alrededor de 600 días de lactancia que producen el doble (alrededor de 18 mil kilogramos por lactancia) que las vacas con lactancias de 300 días (alrededor de nueve mil kilogramos en 10 meses de lactancia).