Noticias Internacionales

Estrategias de Manejo para Lograr Buenos Índices Ganaderos

Publicado

en

(2.158 lecturas vistas)

COMPARTIR

Con un impulso destacado de la Cuenca del Salado bonaerense, el stock aumentó por tercer año consecutivo, según informó la Secretaría de Agricultura de Argentina. El buen manejo es una de las claves.

Elaborado con los datos que releva el Servicio de Sanidad y Calidad Agroalimentaria del Senasa argentino, un informe de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca –perteneciente al Ministerio de Agricultura de Argentina– afirmó que las existencias bovinas registraron un incremento del 1,3% con respecto al año anterior.

Para Jorge Dillon, subsecretario de Ganadería de la cartera agropecuaria, ese aumento “es producto del incremento de vientres y 350 mil terneros y terneras nacidos durante la última campaña”. Además, el funcionario destacó que el stock crece por tercer año consecutivo y que puede observarse una mayor participación relativa de hembras sobre el total.

De acuerdo con el informe de la secretaría, la provincia de Buenos Aires registró un aumento de 850 mil cabezas; es decir, un 5% con respecto a 2013. Para Dillon, ese crecimiento supera al resto del país: “En la Cuenca del Salado en su conjunto es donde mayor fue el aumento de la hacienda, se destaca como una región donde se dio un aumento significativo con un 10% por encima del resto”.

En ese contexto, especialistas del INTA Cuenca del Salado presentaron algunas pautas de manejo para lograr buenos índices de preñez en sus rodeos, una de las claves que explican el aumento de las existencias bovinas.

“Frente a un aumento de la carga, la prolongación del período de lactancia de los terneros puede repercutir en el estado corporal en el inicio del invierno, incrementando las posibilidades de llegar al parto con bajo estado corporal”, explicó Sebastián López Valiente, de esa unidad del INTA. Para el técnico, en esas condiciones, “el destete no debería extenderse más de seis o siete meses” dado que, si las vacas llegan flacas al parto, disminuyen las chances de preñarse.

En esa línea, López Valiente recomendó clasificar a las vacas con estado corporal inferior al óptimo –un tres, en una escala donde uno es igual a flaca y cinco equivale a gorda– y asignarles los potreros más empastados.

“Si por alguna razón no se pudiera contar con un recurso alimenticio extra o si los potreros no soportan la carga asignada, por exceso de carga o inclemencia climática, se debería realizar un diagnóstico de la situación reproductiva en el cual se debe tener en cuenta la distribución de parición y la disponibilidad de forraje durante el servicio”, añadió el especialista.

Foto. De acuerdo con el informe de la secretaría, la provincia de Buenos Aires registró un aumento de 850 mil cabezas; es decir, un 5% con respecto a 2013.

Herramientas para el Diagnóstico

De acuerdo con Sebastián Maresca, técnico del INTA Cuenca del Salado, existen métodos para determinar cuál es la actividad sexual de los vientres antes del servicio, mediante palpación transrectal o ecografía de ovarios.

“Estas técnicas permiten detectar individualmente las vacas que se encuentran en anestro –sin actividad sexual– y aplicar medidas a tiempo para evitar bajos porcentajes de preñez”, dijo Maresca.

Al respecto, detalló cuáles podrían ser esas medidas:

a- Mocheta: es un dispositivo nasal plástico que impide el amamantamiento. Se coloca preferentemente a terneros de más de 70 kg durante 7 a 15 días. En este período el ternero puede perder unos 5 a 10 kg.

b- Destete temporario: se retiran los terneros de la vista de sus madres y se los encierra durante 48 a 72 horas en una plazoleta con agua, pasto y sombra.

c- Tratamientos hormonales: mediante ecografía se detectan las vacas en anestro y se les implanta un dispositivo intravaginal con progesterona. A los 7 días se retira el dispositivo y se inyectan dos drogas que estimulan el crecimiento folicular y la ovulación. Esta técnica, como las anteriores, se recomiendan en vacas con estado corporal regular (2 a 2,5).

d- Destete anticipado: es un destete definitivo que se realiza a terneros con 4 meses de vida y que pesan entre 100 y 120 kg. Las vacas de parición temprana pasan el último mes de servicio sin ternero al pie. La alimentación del ternero no es tan compleja como en un destete precoz y se puede basar en campo natural o pasturas de buena calidad suplementadas con granos de maíz o cebada a razón de 1,5 kg por ternero por día.

e- Destete precoz: al igual que con destete anticipado, esta técnica se recomienda en los vientres con muy bajo estado corporal (menor a 2). Los terneros con pesos entre 60 a 80 kg (de 1,5 a 3 meses de edad) son destetados y encerrados en una plazoleta donde comienzan a alimentarse en bateas. Dependiendo de la disponibilidad de pasto se puede continuar con la suplementación o con encierre total a base de balanceados de alto contenido y calidad proteica. Las ganancias de peso en los encierres son de 800 a 900 gramos. Se debe consultar al veterinario para elaborar un calendario sanitario preventivo.

Los especialistas del INTA Cuenca del Salado resaltaron que la eficacia de estas técnicas dependerá de la alimentación durante el servicio. Al mismo tiempo, coincidieron en la importancia de monitorear mensualmente el estado de los rodeos, lo cual permite anticiparse y aplicar las herramientas de manejo adecuadas para evitar disminuciones en los porcentajes de preñez.

Leer más
Click para comentar

Deja un mensaje

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Noticias Internacionales

Girolando, la mejor alternativa para la producción lechera en climas cálidos

Publicado

en

COMPARTIR

Con una producción promedio de 5.000 litros de leche durante 305 días bajo el calor del clima tropical, estas terneras presentan una mayor resistencia y adaptación al entorno, lo que aumenta sus tasas de supervivencia. Estas cualidades las destacan en un país donde la cría de terneras enfrenta tasas de mortalidad de hasta el 25 %. Las terneras Girolando pueden producir en promedio 5.000 litros de leche durante 305 días en climas cálidos. Fotos: Felipe Argoty, magíster en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia sede Palmira.

En Colombia la producción lechera afronta una crisis marcada por los altos costos tanto de los insumos importados utilizados por la industria como de los alimentos concentrados para el ganado, además de factores como la tendencia al bajo consumo en el mercado y el encarecimiento de las tierras en zonas tradicionales de ganadería, entre otros, situación que ha obligado a los productores a buscar nuevas alternativas que permitan mantener la rentabilidad del negocio y reducir las pérdidas.

Foto. La cría de terneras enfrenta tasas de mortalidad de hasta el 25 %

Cerca del 80 % de la producción de leche proviene de animales con composición genuina en su genética, escenario en el que resaltan las terneras Girolando, una raza que toma y supera lo mejor del cruzamiento entre la productividad de la Holstein y la rusticidad de la Gyr, lo que les permite adaptarse a altas temperaturas, ser más tolerantes a parásitos y poderse pastorear en condiciones adversas, características que las convierten en la mejor opción para climas tropicales como los de Tolima, Valle del Cauca, Magdalena Medio y los Llanos Orientales y la Costa Caribe, en donde han demostrado un rendimiento superior.

En la industria lechera la etapa más crítica es la cría de las terneras, ya que es cuando los animales dependen de una adecuada alimentación y cuidados especiales para asegurar su supervivencia y óptimo desarrollo. Además de ser costosa, esta fase se asocia con altos índices de mortalidad, en particular por problemas de nutrición.

Ante este problema, durante su Maestría en Ciencias Agrarias en la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira, el zootecnista Luis Felipe Argoty López evaluó mediante tres experimentos alternativas para mejorar la rentabilidad durante la cría, con dietas menos costosas pero con el aporte nutricional necesario para evitar problemas de crecimiento y desarrollo, clave en la crianza de reemplazo, cuando preparan a las terneras para que se conviertan en futuras vacas lecheras que renueven el hato y mantengan la productividad del sistema.

Foto. En Colombia cerca del 50 % de la producción de leche proviene de cruces de toros y cebús.

El Estudio

En la investigación se analizó el crecimiento y desarrollo ruminal (ingesta de alimento sólido) de 19 terneras Girolando F1 con edades entre 14 y 22 meses, en el corregimiento de Santa Rosa de Tapias, municipio de Guacarí (Valle del Cauca).

Para el trabajo se hicieron 3 grupos de animales con sendos tratamientos. A los del primer grupo (grupo control) se le suministraron 4 litros de leche al día, repartidas en dos tomas, y concentrado comercial; al segundo, 4 L de leche distribuidos en tres tomas, más consumo de alimento experimental; y al tercer grupo, 4 L de leche distribuidos en tres tomas, más consumo de alimento comercial. A todos los tratamientos se les suministró pasto pangola y agua a voluntad.

Sobre el alimento experimental, el investigador explica que “hicimos ajustes dentro de la proteína, la pusimos un poco más disponible dentro de la dieta de las terneras, usamos soya, maíz, algunos cereales, premezclas, un promotor de crecimiento ruminal y lo que utilizan todos los alimentos concentrados, porque el reto era hacer un concentrado experimental similar en composición al comercial, pero con algunas mejoras”.

Foto. El estudio se realizó con 19 terneras en el corregimiento de Santa Rosa de Tapias (Valle del Cauca)

También recolectó muestras de sangre cada 15 días, para analizar metabolitos como proteína, albúmina, globulinas, calcio, betahidroxibutirato (BHB) y cortisol. Así mismo evaluó parámetros biométricos como edad, peso, circunferencia, altura, ganancia de peso, consumo promedio y conversión alimenticia. Cada variable evaluada se analizó estadísticamente a través de un modelo mixto de medidas repetidas.

Aunque en la ganancia de peso los resultados no arrojaron diferencias significativas entre los tratamientos, entre muestreo sí las hubo y se evidenció que la edad de los animales influye en la concentración de proteínas en la sangre y que el BHB permite conocer indirectamente el desarrollo ruminal.

También se evidenció que “la edad de los animales influye en la concentración de proteínas en la sangre y que el BHB permite conocer indirectamente el desarrollo ruminal”.

Foto. Con la raza Girolando se puede obtener una producción lechera más competitiva y menos dependiente de razas europeas

El investigador destaca que, “este indicador sugiere que las terneras están desarrollando su rumen de forma óptima, lo cual es esencial para una digestión eficiente, y en última instancia para su futura capacidad de producir leche”.

También se registraron bajos niveles de cortisol en la sangre, una hormona que se libera en respuesta al estrés y puede afectar el crecimiento y la salud general del animal. Altos niveles de este indican que las terneras están experimentando estrés, lo que puede influir negativamente en su sistema inmunológico y reducir su capacidad de aprovechar nutrientes, afectando el desarrollo del rumen y la futura producción de leche.

“Si logramos que más productores opten por razas como la Girolando, tendríamos una producción lechera más competitiva y menos dependiente de razas europeas, cuya adaptación a nuestras condiciones es limitada”, anota el magíster.

Leer más

Noticias Internacionales

Ecuador está listo para iniciar su negocio de exportación de bovinos a Medio Oriente

Publicado

en

COMPARTIR

Leer más

Noticias Internacionales

El Salvador promueve la ganadería sostenible

Publicado

en

COMPARTIR

Leer más

Tendencia