Escribe: Luis Alfredo Chávez Balarezo

DVM, Supervisor de Investigación en Sanidad Animal de Agrovet Market

Las enfermedades respiratorias son particularmente importantes en todo tipo de producción, sobre todo en la producción bovina, debido a los múltiples factores relacionados con el manejo de los animales, el medio ambiente y los agentes infecciosos. Dentro de las enfermedades respiratorias bovinas más comunes tenemos a las bronconeumonías bacterianas, siendo los principales agentes causales: Mannheimia haemolytica, Pasteurella multocida, Histophilus somni (Haemophilus somnus), Corynebacterium pyogenes, los cuales generan complicaciones con otras infecciones virales y bacterianas secundarias (Divers y Peek, 2008).

La Doxiciclina y el Florfenicol son antibióticos de amplio espectro que actúan tanto sobre bacterias Gram positivas como Gram negativas, así como en algunas especies de ricketsias y clamidias (Prescott, 2002). Ambos tienen acción bacteriostática, ya que actúan sobre receptores ribosomales bacterianos 50s para Florfenicol y 30s para Doxiciclina, bloqueando la comunicación entre ARNr y ARNt, inhibiendo así la síntesis proteica bacteriana (Plump, 2002) y por lo tanto el crecimiento y la multiplicación de los microorganismos (Adams, 2003); sin embargo, en recientes investigaciones se cree que la doxiciclina tendría una efecto además en la subunidad ribosomal 50s (Sumano y Ocampo, 2006 Plumb, 2011; Adams, 2003).

El florfenicol pertenece a la familia de los fenicoles, reconocidos por su amplio espectro de acción. El florfenicol contiene modificaciones mayores frente al ancestro de la familia de los fenicoles, el cloranfenicol. Una diferencia es un cambio de un grupo nitro en grupo metil-sulfonil, que elimina el riesgo de aplasia medular que hizo prohibir el cloranfenicol (Adams, 2003).

Otra diferencia es un cambio de un grupo hidroxilo por un átomo de flúor, haciendo al florfenicol insensible a las cloranfenicol- acetil-transferasas, enzima productora del proceso de resistencia bacteriana al cloranfenicol (Prescott, 2002).

Dentro del espectro de acción del florfenicol destaca su efecto sobre Proteus spp., Shigella spp., Salmonella spp., Staphylococcus spp., Enterococcus spp. y Haemophilus spp. (Sumano y Ocampo, 2006). A su vez, se han realizado numerosos estudios en bovinos donde se ha demostrado la efectividad del florfenicol en el tratamiento del Sindrome Respiratorio Bovino (Pasteurella multocida, Mannheimia haemolytica o Histophillus somni) (Adams, 2003).

Por su parte, la Doxiciclina es un derivado sintético de las tetraciclinas, que actúa sobre bacterias, mycoplasmas, clamidias y algunos protozoarios (Prescott, 2002). Es la más liposoluble de las tetraciclinas por lo que logra una amplia distribución en el organismo, contando con un mayor índice de biodisponiblilidad. Las bacterias más sensibles a la Doxiciclina son los Streptococcus spp., neumococos, gonococos, Clostridium spp. (Sumano y Ocampo, 2006), Bacillus spp, Counebactem-rn spp., Erysipelothryx rhusiopatiae, Listeria monxytogenes, Actinobacillus spp., Brucella spp. Francicella tularensis, Haemophilus spp., Pasteteurella multocida, Borrelia spp., Leptospira spp., Actinomyces spp. y Mycoplasma spp. (Adams., 2003).

La actividad de la Doxiciclina frente a las bacterias Gram negativas es similar a la del Florfenicol. A su vez, se destaca que la Doxiciclina es efectiva contra patógenos respiratorios (Sumano y Ocampo, 2006). En procesos respiratorios del ganado vacuno se observa, que tanto la doxiciclina como el florfenicol resultan efectivos contra los principales agentes etiológicos (Pasteurella multxida, Mycoplasma bovis y Mycoplasma mycoides, Mannheimia haemolytica, Arcanobacterium pyogenes), aunque cabe recalcar que se ha reportado mayor resistencia a las tetraciclinas (Constable et al, 2008). Debido al surgimiento de cepas resistentes de los patógenos respiratorios en mención, es necesario buscar combinaciones antibióticas que evidencien un efecto sinérgico sin necesidad de aumentar la concentración mínima inhibitoria (CMI) de cada uno.

Por otro lado, hay fármacos que no afectan directamente la infección, pero mejoran la sintomatología del animal, evitando que el estado anímico del animal decaiga, generando más pérdidas. Entre estos fármacos tenemos al ketoprofeno, la bromhexina y la clorfenamina.

El ketoprofeno es un antiinflamatorio no esteroide perteneciente al grupo del ácido arilpropiónico. Posee efectos analgésicos y antipiréticos al inhibir la ciclooxigensa, conduciendo a un bloqueo de la biosíntesis de prostaglandinas a partir del ácido araquidónico, reduciendo el dolor, la fiebre y la inflamación. Se debe mencionar también que el ketoprofeno tiene antagonismo con la bradiquinina, reduciendo la vasodilatación, y tiende a estabilizar las membranas lisosomales, aumentando aún más sus efectos mencionados (EMEA, 1995; Sumano y Ocampo, 2006; Plumb, 2011).

La Bromhexina es una benzilamina con propiedades expectorantes y mucolíticas. Puede ser usado solo, pero generalmente es usado con antibióticos en el tratamiento de enfermedades respiratorias. Los daños que se generan en el epitelio respiratorio y/o mucosa traqueobronquial provocan una modificación en su estructura epitelial, y es por esto que las secreciones mucosas traqueobronquiales aumentan en viscosidad y cambian su composición. Al tener un moco más viscoso, se obstaculiza la secreción, dificulta el movimiento ciliar normal e impide la limpieza de las vías respiratorias, disminuyendo la permeabilidad de los capilares pulmonares y favoreciendo la proliferación de bacterias, agravando el cuadro. La bromhexina aumenta el volumen de la secreción bronquial, reduciendo su viscosidad e incrementando la actividad ciliar traqueobronquial, aumentando así la expulsión del mucus (EMEA, 1998).

La clorfenamina es un antihistamínico que reduce y ayuda a prevenir los efectos adversos o reacciones mediados por histamina. La histamina inhibe competitivamente los receptores Hl de histamina, previniendo su efecto en el sitio de acción. Así, la clorfenamina, se usa en la resolución de los síntomas derivados de procesos alérgicos, asociados a reacciones de hipersensibilidad, concurrentes en numerosos procesos infecciosos (Plumb, 2011).

Así, Agrovet Market Animal Health, en su constante búsqueda de innovación y generación de nuevos productos, que propongan un gran beneficio para sus consumidores, formula Respibiotic® 48 horas, una solución en base de Florfenicol (200 mg), Doxiciclina hiclato (100 mg), Ketoprofeno (20 mg), Bromhexina (5 mg), Clorfenamina (5 mg) (por cada ml de producto). Este producto ha demostrado tener una gran de efectividad en la resolución de procesos infecciosos respiratorios.

Bibliografia

1. Adams R. 20003. Farmacologia y terapéutica veterinaria. 2da. edición. España: Acribia 1277p.
2. Constable p, Pyorata S. Smith G. 2008. Guidelines for antimicrobial use in cattle en: Guardabassi L, Jensen L, Kruse H. Guide to antimicrobial use in animals. Dinamarca: Blackwell Publishing app: 143-157
3. EMEA 1995. Comitee for veterinary medicinal products: Ketoprofen.
4. EMEA 1998. Comitee for veterinary medicinal products: Bromhexine.
5. Picazo J. 2000. Procedimientos en Microbiología Clínica. Recomendaciones de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Micología Clínica Cap. 12. Métodos Especiales para el estudio de la sensibilidad a los antimicrobianos.
6. Prescott JF, Baggott JD, Walker RD. 2002. Terapéutica microbiano en medicina veterinaria. 3ra. edición. Argentina Intermedica . 687p.
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8. Sumano H, Ocampo L. 2006. Farmacología veterinaria 3ra edición. México: McGraw-Hill interamericana 680p.
9. Tag JF, Ruiz F, Herrera LA 2007. Evaluación de la eficacia y tolerancia de una solución antibiótica inyectable sobre la base de florfenicol, dociciclina hiclato, ketoprofeno, bromhexina clorhidrato y clorfenamina maleato (Respibiotic® 48 horas) en el tratamiento de infecciones respiratorias de vacunos de engorde.