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El Fantasma de la Fiebre Aftosa en Uruguay

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El acuerdo celebrado entre Uruguay y Japón para la apertura del mercado japonés para las carnes uruguayas bovina, sin hueso y madurada es un hito para festejar porque abre para nuestro país un mercado muy exigente que paga excelentes precios. La alegría del presidente Tabaré Vázquez era más que justificada, 9 años de ardua tarea culminada exitosamente.

La otra cara de la moneda. La crisis instalada en Uruguay en 2002 y sus antecedentes vive y lucha, todavía seguimos soportando sus coletazos.

La fiebre aftosa esuna enfermedad viral altamente contagiosa que afecta a los animales, entre ellos al ganado.

En 1990 la aftosa se erradicó totalmente debido a que se realizó una vacunación masiva de todo el ganado bovino. Pocos años después -en el año 1994- el mismo gobierno de la época decidió suspender la vacunación.

En 1996 el país lograba la calificación de país “libre de aftosa sin vacunación” otorgada por la Organización Internacional de Epizootias, una calificación muy importante que le permitía acceder a los mercados más exigentes y a mayores precios.

En el año 2000 comenzó el desastre. Jorge Batlle – en una coalición de gobierno de colorados y blancos – con su ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, el nacionalista Gonzalo González, tomaron decisiones que el Uruguay de hoy sigue pagando.

En los primeros meses del año 2000 había aparecido un brote de aftosa en Argentina. Los productores rurales y sus organizaciones gremiales preocupadas por el contagio que podía ocurrir en nuestro ganado solicitaron al gobierno volver a la vacunación para prevenir males mayores.

Como vimos Uruguay tenía la certificación “libre de aftosa sin vacunación”, mientras que Argentina y Brasil eran libres de aftosa pero “con vacunación”.

Jorge Batlle se negó rotundamente, porque vacunar significaba perder el status sanitario internacional del que gozábamos. A los 3 meses, la aftosa ya estaba en nuestro país, como dicen algunos gurises ahora ¡”Uruguay nomá”!

Lo que siguió fue el drama previsible. Se buscó un chivo expiatorio y se recurrió al escrache público de un productor rural radicado en Artigas; un tal Arbiza. Acusaciones que fueron encabezadas por el propio Presidente de la República y que nunca fueron probadas. Las divulgaciones de las que tanto se critican en los últimos tiempos son un juego de niños al lado de aquellas situaciones.

El brote surgió en el departamento de Artigas primero en unos cerdos, luego se extendió al ganado. Se “aisló” el departamento como si fueran extraterrestres, se comenzó con el sacrificio de 64 bovinos y 11 porcinos, en los días subsiguientes 4.000 lanares y 1.700 vacunos, por último en una jornada negra y de luto para el país con la ayuda del Ejército y con la gente llorando para proteger sus animales se sacrificaron 20.000 en todo el país.

Las consecuencias:

El gobierno tuvo que suspender todas las exportaciones de carne en todo el mundo, el principal rubro de exportación del país. Las pérdidas fueron millonarias, se cerraron todos los mercados automáticamente y lentamente se fueron recuperando con el correr de los años. Japón es el último eslabón de aquellos sucesos de negligencia y desgobierno.

Fue el preámbulo a la terrible crisis económica del año 2002.

Hoy el país exporta carnes a todo el mundo sin ninguna restricción y a los mercados más exigentes. Gozamos de la trazabilidad total del producto, desde su nacimiento hasta el proceso de faena, corte y preparado en el frigorífico y estos a su vez trabajan con la mayor tecnología de punta haciendo honor a 400 años de experiencia, tradición y cultura de un sector productivo emparentado con el nacimiento de este territorio.

 

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Girolando, la mejor alternativa para la producción lechera en climas cálidos

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Con una producción promedio de 5.000 litros de leche durante 305 días bajo el calor del clima tropical, estas terneras presentan una mayor resistencia y adaptación al entorno, lo que aumenta sus tasas de supervivencia. Estas cualidades las destacan en un país donde la cría de terneras enfrenta tasas de mortalidad de hasta el 25 %. Las terneras Girolando pueden producir en promedio 5.000 litros de leche durante 305 días en climas cálidos. Fotos: Felipe Argoty, magíster en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia sede Palmira.

En Colombia la producción lechera afronta una crisis marcada por los altos costos tanto de los insumos importados utilizados por la industria como de los alimentos concentrados para el ganado, además de factores como la tendencia al bajo consumo en el mercado y el encarecimiento de las tierras en zonas tradicionales de ganadería, entre otros, situación que ha obligado a los productores a buscar nuevas alternativas que permitan mantener la rentabilidad del negocio y reducir las pérdidas.

Foto. La cría de terneras enfrenta tasas de mortalidad de hasta el 25 %

Cerca del 80 % de la producción de leche proviene de animales con composición genuina en su genética, escenario en el que resaltan las terneras Girolando, una raza que toma y supera lo mejor del cruzamiento entre la productividad de la Holstein y la rusticidad de la Gyr, lo que les permite adaptarse a altas temperaturas, ser más tolerantes a parásitos y poderse pastorear en condiciones adversas, características que las convierten en la mejor opción para climas tropicales como los de Tolima, Valle del Cauca, Magdalena Medio y los Llanos Orientales y la Costa Caribe, en donde han demostrado un rendimiento superior.

En la industria lechera la etapa más crítica es la cría de las terneras, ya que es cuando los animales dependen de una adecuada alimentación y cuidados especiales para asegurar su supervivencia y óptimo desarrollo. Además de ser costosa, esta fase se asocia con altos índices de mortalidad, en particular por problemas de nutrición.

Ante este problema, durante su Maestría en Ciencias Agrarias en la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira, el zootecnista Luis Felipe Argoty López evaluó mediante tres experimentos alternativas para mejorar la rentabilidad durante la cría, con dietas menos costosas pero con el aporte nutricional necesario para evitar problemas de crecimiento y desarrollo, clave en la crianza de reemplazo, cuando preparan a las terneras para que se conviertan en futuras vacas lecheras que renueven el hato y mantengan la productividad del sistema.

Foto. En Colombia cerca del 50 % de la producción de leche proviene de cruces de toros y cebús.

El Estudio

En la investigación se analizó el crecimiento y desarrollo ruminal (ingesta de alimento sólido) de 19 terneras Girolando F1 con edades entre 14 y 22 meses, en el corregimiento de Santa Rosa de Tapias, municipio de Guacarí (Valle del Cauca).

Para el trabajo se hicieron 3 grupos de animales con sendos tratamientos. A los del primer grupo (grupo control) se le suministraron 4 litros de leche al día, repartidas en dos tomas, y concentrado comercial; al segundo, 4 L de leche distribuidos en tres tomas, más consumo de alimento experimental; y al tercer grupo, 4 L de leche distribuidos en tres tomas, más consumo de alimento comercial. A todos los tratamientos se les suministró pasto pangola y agua a voluntad.

Sobre el alimento experimental, el investigador explica que “hicimos ajustes dentro de la proteína, la pusimos un poco más disponible dentro de la dieta de las terneras, usamos soya, maíz, algunos cereales, premezclas, un promotor de crecimiento ruminal y lo que utilizan todos los alimentos concentrados, porque el reto era hacer un concentrado experimental similar en composición al comercial, pero con algunas mejoras”.

Foto. El estudio se realizó con 19 terneras en el corregimiento de Santa Rosa de Tapias (Valle del Cauca)

También recolectó muestras de sangre cada 15 días, para analizar metabolitos como proteína, albúmina, globulinas, calcio, betahidroxibutirato (BHB) y cortisol. Así mismo evaluó parámetros biométricos como edad, peso, circunferencia, altura, ganancia de peso, consumo promedio y conversión alimenticia. Cada variable evaluada se analizó estadísticamente a través de un modelo mixto de medidas repetidas.

Aunque en la ganancia de peso los resultados no arrojaron diferencias significativas entre los tratamientos, entre muestreo sí las hubo y se evidenció que la edad de los animales influye en la concentración de proteínas en la sangre y que el BHB permite conocer indirectamente el desarrollo ruminal.

También se evidenció que “la edad de los animales influye en la concentración de proteínas en la sangre y que el BHB permite conocer indirectamente el desarrollo ruminal”.

Foto. Con la raza Girolando se puede obtener una producción lechera más competitiva y menos dependiente de razas europeas

El investigador destaca que, “este indicador sugiere que las terneras están desarrollando su rumen de forma óptima, lo cual es esencial para una digestión eficiente, y en última instancia para su futura capacidad de producir leche”.

También se registraron bajos niveles de cortisol en la sangre, una hormona que se libera en respuesta al estrés y puede afectar el crecimiento y la salud general del animal. Altos niveles de este indican que las terneras están experimentando estrés, lo que puede influir negativamente en su sistema inmunológico y reducir su capacidad de aprovechar nutrientes, afectando el desarrollo del rumen y la futura producción de leche.

“Si logramos que más productores opten por razas como la Girolando, tendríamos una producción lechera más competitiva y menos dependiente de razas europeas, cuya adaptación a nuestras condiciones es limitada”, anota el magíster.

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