Cuba autorizó este miércoles la venta y consumo de carne de vaca, leche y derivados en moneda local y en dólares, siempre que los ganaderos entreguen al Estado un cupo estipulado de su producción.
La medida, publicada hoy en la Gaceta Oficial, incluye requisitos para el sacrificio del ganado bovino en Cuba, la debida inscripción en los registros y la obligatoriedad de mantener el crecimiento del rebaño, según la estatal Agencia Cubana de Noticias.
El Gobierno anunció en abril que los campesinos podrían comercializar los excedentes en la producción de carne de vaca, leche y derivados, un anuncio que llegó en medio de una fuerte escasez de alimentos en el país caribeño.
Esta decisión forma parte de un paquete de 63 medidas aprobadas el mes pasado para “potenciar la producción de alimentos”, la prioridad en este momento en Cuba, donde escasean casi todos los víveres.
El Estado comprará parte de la producción
El Estado seguirá comprando a los productores el litro de leche de vaca a 7,5 pesos cubanos (30 centavos de dólar al cambio oficial) y a nueve pesos (37 centavos de dólar) cuando este “cumpla o sobrecumpla el plan de entrega mensual a la industria”, de acuerdo a la información difundida en aquel momento.
Los agricultores y ganaderos solo podían vender sus productos a la empresa estatal de acopio a precios fijados por el Estado, lo que generó insatisfacciones por retrasos en los pagos o incumplimientos de la recogida por parte de la entidad.
Los altos precios de los alimentos y el difícil acceso a ellos debido al desabastecimiento han sido motivo de descontento popular durante muchos años en Cuba y la situación se ha agravado en el último año por la pandemia del coronavirus y el endurecimiento del embargo de Estados Unidos.
Cuba importa más del 80 % de los víveres que consume, lo cual representa un gasto anual de 2.000 millones de dólares, según datos oficiales.
En el caso de la carne de res, el Código Penal sanciona el sacrificio y la venta ilegal de ganado mayor, así como a quienes la compren con penas que van de tres a 10 años de prisión.
Más de la mitad de la producción agropecuaria local está en manos del sector no estatal, que tiene cultivado el 66 % de la tierra, reflejó, por su parte, el economista cubano Omar Everleny en su artículo “Apuntes para un propósito de la agricultura cubana”, publicado en el portal web Oncuba.
El reordenamiento del sector agrícola para aumentar la producción de alimentos, asunto considerado de “seguridad nacional”, es parte de las reformas económicas impulsadas en 2011 por el expresidente cubano Raúl Castro.