Según el Censo 2014, Costa Rica cuenta con más de un millón de hectáreas de pasturas. La directriz declara de interés público y conveniencia nacional la investigación, innovación y transferencia tecnológica en pastos y forrajes.
El valor estratégico de los pastos y forrajes como base alimentaria para la producción pecuaria costarricense, quedó reconocido mediante la conformación de una Red Nacional de Pastos y Forrajes, la cual quedó oficializada en Balsa de Atenas, como parte de las acciones contempladas en la Estrategia Nacional de Desarrollo Ganadero Bajo en Carbono.
La Red Nacional de Pastos y Forrajes de Costa Rica será un espacio de coordinación interinstitucional e intersectorial, conformada por funcionarios del Instituto Nacional de Innovación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (INTA), la Dirección de Extensión Agropecuaria del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el Programa Nacional de Ganadería y el Programa de Investigación y Transferencia en Tecnología PITTA Baja en Carbono, quienes deberán coordinar y enfocar acciones para promover y apoyar el desarrollo, aplicación y difusión de prácticas y procesos, que optimicen el manejo forrajero y permitan una transferencia efectiva de la tecnología al productor que coadyuve en el desarrollo de su competitividad.
Durante la firma de la directriz ministerial que oficializa la Red, la Viceministra de Agricultura y Ganadería, Ivannia Quesada Villalobos, explicó que el sector ganadero requiere del desarrollo forrajero para enfrentar el impacto del cambio climático y competir en una economía mundial cada vez más cambiante. “La importancia de la investigación en pastos y forrajes es innegable. La conformación de la Red Nacional de Pastos y Forrajes, la cual conformamos hoy, servirá para potenciar la investigación en forrajes promisorios no solo para lechería especializada, sino para todas las áreas de la producción animal que así lo requieran. Esperamos que sirva para unir la realidad del productor con la del investigador, de manera que las investigaciones no se queden guardadas en bibliotecas, sino que los nuevos conocimientos sean transferidos al campo donde deben dar frutos, con miras a alcanzar el desarrollo ganadero de una manera sostenible económica y ambientalmente”, comentó la Viceministra Quesada Villalobos.
La directriz declara de interés público y conveniencia nacional la investigación, innovación y transferencia tecnológica en pastos y forrajes y se suscribió durante la Inauguración del I Congreso Nacional Forrajero y Jornada de Investigación, 2015, que se lleva a cabo en la Universidad Técnica Nacional (UTN), en Balsa de Atenas.
El recurso forrajero, compuesto por gramíneas, leguminosas y otras especies arbustivas, son la base alimenticia de la producción ganadera costarricense y cubre una amplia área del territorio nacional. Según el Censo 2014, Costa Rica cuenta con más de 1 millón de hectáreas de pasturas.
Partiendo que los pastos y forrajes son la base de la alimentación animal, la propuesta costarricense debería ser imitada por otros países Latinoamericanos que buscan alcanzar la soberanía alimentaria para sus poblaciones rurales sobre todo respecto a producción de leche y carne.