Utilizando tecnología avanzada disponible en el Centro de Genómica Nutricional Agroacuícola de Chile, científicos lograron potenciar formulación sólo utilizando compuestos naturales.
Utilizando compuestos naturales y sustentables el doctor en Biotecnología del Centro de Genómica Nutricional Agroacuícola (CGNA), César Burgos, y la empresa Citrex-Chile lograron desarrollar una solución innovadora para prolongar la vida útil de los alimentos al controlar bacterias y patógenos responsables de la descomposición, el que será usado principalmente en productos cárnicos, generando una gran ventaja para la industria de alimentos.
Esta solución científica fue solicitada al CGNA por Citrex, empresa de aditivos alimenticios con presencia en este país y Brasil, y fue desarrollada a través de la tecnología de microencapsulación, en este caso, de compuestos naturales con propiedades antibacterianas, logrando además mantener las propiedades organolépticas de los alimentos y su composición. Lo innovador de este aditivo alimenticio, es que en su formulación sólo se utilizan materias naturales, entrando de lleno a un espacio que estaba liderado por los productos más artificiales, sintéticos.
La tecnología de microencapsulación se utiliza ampliamente en la industria de alimentos para proteger los compuestos bioactivos (antioxidantes, vitaminas, aceites esenciales y ácidos grasos saludables) frente a estreses ambientales como la temperatura, el oxígeno y la luz, ocurridos durante el procesamiento y almacenaje de los alimentos; prevenir así la oxidación, rancidez y/o la pérdida de estos valiosos compuestos.
Por otra parte, la tecnología prolonga la liberación y efectividad de los productos microencapsulados. Así explicó César Burgos del área de tecnología y ciencia de los alimentos del CGNA, “puntualmente con Citrex Chile desarrollamos una emulsión (mezcla de aceite y agua mediante la incorporación de un emulsionante y posterior homogenización) para formar gotitas microscópicas de aceites esenciales, las que recubrimos con un polímero natural como material encapsulante, con la finalidad de producir un aditivo alimentario estable (sin separación del agua y el aceite). Lo relevante es que con esta tecnología logramos enmascarar el olor y sabor de los aceites encapsulados y a la vez prolongar la efectividad del producto.
“Actualmente hay un interés creciente en la industria de los alimentos para desarrollar nuevos e innovadores sistemas de encapsulación que permitan mejorar la calidad y funcionalidad”, aseveró Burgos quien actualmente lidera proyectos de investigación para la encapsulación de aromas y antioxidantes para desarrollar ingredientes alimentarios funcionales.
La innovación de base científica promete dar el giro desde la tradicional industria de aditivos con compuestos sintéticos, hacia la meta de mejorar la calidad de los alimentos a través del cada vez más demandado, mercado de lo sustentable y biodegradable.
Así calificó Susana Valdés, gerente de Citrex Chile. “nosotros trabajamos con productos amigables con el medio ambiente y el operador, trabajamos con productos orgánicos, no sintéticos, a nivel nacional e internacional y necesitábamos mejorar una emulsión y resultó mucho mejor de lo que esperábamos”, dijo Valdés.
“Este tema lo teníamos topado por lo menos hace un par de años y tratamos de hacer algo a través distintas instituciones, donde fue muy difícil porque tienen una visión muy académica, no hay una visión de ayudar en los desarrollos y luego de ese peregrinar llegamos al CGNA y la experiencia ha sido realmente buena, porque ustedes entienden el sentido de trabajar la mutua cooperación y hacer un resultado a escala industrial, impecable, eficiente y en realidad a muy poco plazo y hoy tenemos este producto que lo podemos escalar comercialmente con el beneficio para todos”, agregó la ejecutiva de Citrex Chile.