En la región norte de Rio Grande do Sul, la muerte del ganado preocupa a los productores. Por lo menos 50 animales ya han muerto este año 2019 en 15 propiedades con síntomas de rabia.
En la ciudad de Soledade, Adriano Borges Knopf perdió 4 animales en menos de 15 días. «Comenzamos a sospechar que no era una cosa normal.
Nos dimos cuenta de que los animales ‘perdieron’ la fuerza en las piernas y no se levantaron más, » dijo el productor rural. Un informe posterior señaló que el ganado vacuno de Adriano sufría de rabia de herbívoros, enfermedad causada por un virus transmitido por murciélagos.
Otros 4 bovinos del productor Luiz Carlos dos Santos también murieron debido al problema. «Es de suerte que vivimos. Nosotros pretendíamos mejorar este año», se lamenta sobre las pérdidas económicas en la producción.
El desafío ahora es controlar el transmisor de la enfermedad que afecta a este ganado. La mayoría de los animales que murieron fue atendida por el veterinario Bolívar Calderón, que es parte de una cooperativa en la región. «Hay personas que tienen 10 vacas en lactancia y acabaron perdiendo siete, entonces la rentabilidad del negocio se acaba», señala.
La última semana Abril/2019, un murciélago infectado fue encontrado cerca de las propiedades afectadas. Los técnicos de la Secretaría de Agricultura del Estado hicieron una encuesta para tratar de identificar brotes de esta dolencia.
Además del daño económico, los productores también están preocupados por la transmisión de la rabia a los seres humanos. La enfermedad, sin embargo, no es transmitida por consumo de leche o carne.
«La persona debe aplicarse la vacuna si tiene demasiado riesgo, un contacto muy cercano, si hubiera sufrido una mordedura animal, tuvo en contacto muy íntimo con un animal que presenta síntomas clínicos de rabia» , explicó la veterinario Isadora Corrêa. «La vacuna no está disponible para toda la población, ni tendría caso aplicarla masivamente, porque el riesgo de transmisión de la rabia de los herbívoros a los seres humanos es muy bajo «, añadió.
La medida que ha sido adoptada por los productores que enfrentan el problema es la vacunación del resto de la manada que no ha sido afectada por la enfermedad.