El Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) reintroducirá a su estado natural a 30 ejemplares de Suri o avestruz andina juveniles, conservados en los módulos de Chapuco y Calachaca que dirige el Proyecto Especial Binacional Lago Titicaca (PEBLT).
La reintroducción se ejecutará en el distrito de Mazocruz, de la provincia de El Collao, en la región Puno, informó el director ejecutivo del PEBLT, Julver Vilca Espinoza, quien explicó que los Suris liberados tendrán chips con GPS para monitorearlos constantemente, con la finalidad de evaluar su comportamiento y desplazamiento.
El funcionario sostuvo que estas acciones se realizan con la finalidad de preservar estas aves que están en peligro de extinción.
Precisó que esta labor será coordinada con el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) y el Servicio Nacional Forestal y Fauna Silvestre (Serfor), quienes certificarán el estado de los animales antes de su liberación.
“Se desarrollará una campaña informativa y de sensibilización, dirigida a la población, sobre el trabajo de reintroducción y se incidirá sobre las sanciones que existen por atentar contra estas aves, con la finalidad de evitar el comercio de sus plumas, huevos y carne”, manifestó.
Vilca Espinoza refirió que el PEBLT tiene a su cargo tres centros de conservación de esta especie, donde actualmente existen 224 suris.
Suri
El Suri (Rhea pennata) es un ave de gran tamaño, llega a medir hasta 1.5 metros de altura y pesar hasta 30 kilogramos. Es corredora y no voladora. Tiene el pico gris y la cabeza, el cuello y el dorso gris parduzco con extremos de plumas blancas.
El macho se distingue por la cantidad de plumaje, que es mayor a la de la hembra que le da una apariencia de mayor estatura. En época de reproducción, el macho tiene las plumas del costado del cuerpo muy largas (casi arrastrándolas por el suelo).
El Suri recibe también como nombres el avestruz o ñandú andino habita en desiertos, suelos salinos, estepas arbustivas de Lepidophylum, áreas poco inundadas y bofedales. Es vegetariano e huidizo al sentirse perseguido.