La llegada de 50 carnerillos de raza Texel a los rebaños de pequeños crianceros ovinos de la comuna chilena de Loncoche, provocará un paulatino cambio en la calidad de las crías, carne, peso y canal, que significará aumentar los ingresos de la AFC.
Recalcando la importancia de la iniciativa, ya que surge de los pequeños productores ovinos de Loncoche, el Ministro de Agricultura de Chile, José Antonio Galilea, encabezó el lanzamiento del «Proyecto de Transferencia Genética Ovina de la comuna de Loncoche, para incrementar la productividad y el rendimiento económico».
A juicio de la autoridad, «este proyecto es importante porque surge de los pequeños productores ovinos de Loncoche, quienes tienen bastante experiencia en el rubro y deciden incorporar mejoramiento genético. Como Gobierno estamos incorporando genética de calidad a un rebaño ovino que experimentará un cambio: mayor productividad y mejores índices productivos para 50 productores crianceros», señaló Galilea.
Asimismo, puntualizó que en un par de años los 50 productores beneficiados van a sentir que hubo un antes y un después en la producción de ovinos en sus respectivos previos, «por eso me atrevo a decir sin temor a equivocarme, que va a haber un antes y un después de la incorporación de estas genéticas de primera línea».
El proyecto, con un costo de inversión de 56 millones de pesos, otorgados por el Gobierno Regional y que administra la Fundación para la Innovación Agraria(FIA), permitirá transferir 50 carnerillos Texel a productores del Comité Pro Adelanto de Productores Ovinos de Loncoche. Fue impulsado en una primera etapa por la seremia de Agricultura de La Araucanía y será replicado el 2011 por Indap en toda la región. Contempla además un programa de capacitación en reproducción ovina y alimentación, actividades de difusión y la implementación de un sistema de información para capturar datos de importancia para la evaluación y toma de decisiones en el rubro.
Para el seremi de Agricultura de La Araucanía, René Araneda, «el impacto de esta transferencia será directa en la calidad de la carne, el peso de la canal y los ingresos de los productores; gracias a la cruza entre la raza Texel y otras razas madres vigentes en la pequeña agricultura. Se espera un promedio de entre cuatro y ocho kilos más por cordero, mejor infiltración de grasa y retornos mejorados en hasta un 30% respecto de la producción presente», dijo la autoridad regional.
Por su parte, para Roberto Erices, presidente del Comité Pro Adelanto Productores Ovinos de Loncoche, el proyecto permitirá tener mejor calidad en los rebaños y adquirir un mejor precio comercial. «Nuestro objetivo es llegar a tener un buen producto de carne y lana y con el incentivo que nos da este proyecto, nos permitirá mejorar nuestro suelo, nuestros corrales, ya que incluye un estudio del animal, desarrollo estadístico de la cría y asesoramiento técnico que nos permite mejorar en todo sentido», precisó.
Finalmente, Miguelina Briceño, criancera ovina y secretaria del comité, precisó que «necesitábamos una mano para mejorar nuestros ovinos y esa ayuda llegó desde el Gobierno, dado que durante cuatro años podremos participar de distintos tipos de proyectos adjuntos, como mejoramiento de praderas y construcción de cobertizos», comentó.
Fuente: Minagri