«1 De Junio, Día Mundial De La Leche»
- Hace 15 años, el consumo de leche en el Perú era de 40 kilos o litros por habitante al año. Hoy los peruanos consumen 84 kg/hab/año.
- Sin embargo, es más o menos 30% de lo recomendado por la FAO.
- El Perú no se autoabastece de leche, sino solo en un 70%. El restante 30% los constituyen productos e insumos importados.
- El abastecimiento al consumidor con insumos y producción local protege al consumidor, que ya no depende de precio de los productos importados, que son muy variables y por épocas alcanza valores prohibitivos.
- En el año 2000 el coeficiente de penetración de producto importado era de 10.56%, pero al 2016 disminuyó a 7% (había menos importados), gracias al esfuerzo de la industria nacional para abastecer el mercado con productos de origen nacional.
- Las inversiones en el sector lácteo continuan, respondiendo al normal crecimiento del mercado.
- Preocupa sin embargo algunos proyectos de ley que pretenden prohibir el uso de insumos como la leche en polvo para la elaboración de productos lácteos, ya que esto generaria desindustrización, escasez de productos términados, paralización del 30% del uso de la capacidad instalada y despido de trabajadores, lo que espantará inversiones en el sector.
¿Es el Perú un país ganadero, como Australia o Argentina?, lamentablemente no.
- Solo hemos desarrollado ganadería lechera, en la Costa y parte de la sierra, en donde se compite por las tierras con los productos agrícolas de exportación.
- Debemos ahora volcar nuestros ojos al desarrollo ganadero en la selva, siguiendo el modelo brasilero, el potencial para autoabastecernos de leche existe, pero hay que trabajarlo.
- El Perú debe instaurar modelo de desarrollo del agro en paralelo al de la industria láctea, en donde empresario ganadero invierta en calidad, conocimiento y tecnología.
Justamente como no somos como Australia o Argentina, no debemos de abusar de los ganaderos, que son «la gallinita de los huevos de oro» y darles la oportunidad de crecer su producción y mejorar su situación actual, siempre al borde de la quiebra y que sobreviven con lo poco que les «avientan». No interesa si son de la Costa, Sierra o de la Selva,si siguen con su mentalidad mezquina corta de visión siempre el ganadero saldrá perdiendo, los industriales no ganarán lo que se ganan ahora y dependerán más de la leche de Australia o Argentina, entre otros países, que producen más que nosotros.