La Fertilidad es la Clave

COMPARTIR

Un hato ganadero con 80% de natalidad puede duplicar en número de vientres a otro con 60% de natalidad en sólo 10 años. El amamantamiento restringido que se hace en el doble propósito mejora la fertilidad.

El deseo de todo ganadero es que su hato aumente y que la reproducción del mismo cada día registre un mejor comportamiento. Ahora, en el escenario de las oportunidades que tiene un país como Colombia de ser uno de los principales proveedores de alimentos del mundo y de apostarles a los negocios con los grandes mercados, el deseo pasa a ser algo de vital trascendencia para avanzar en competitividad.

«Se ha afirmado que sin reproducción no hay producción. En los Estados Unidos se ha comprobado que en ganado de carne la reproducción es cinco veces más importante que el peso al destete y 10 veces más importante que la calidad del producto. La reproducción, en síntesis, es la característica de mayor importancia económica en un hato ganadero», dice Ricardo Botero Maya presidente de Asodoble (Asociación de Ganaderos de Razas de Doble Propósito).

Para Botero, a dicho factor no se le ha dado la importancia que merece y esto limita, entre otros, el programa de Fedegán de duplicar el hato nacional, ya que la natalidad en Colombia es de 53 por ciento, porcentaje que es considerado muy bajo en un esquema productivo y en el que se ha registrado una evolución leve en varias zonas ganaderas del país.

Recomienda que los ganaderos tengan en cuenta las siguientes estrategias para mejorar la natalidad.

El qué hacer en genética

En los aspectos genéticos recomienda la adaptación, en la que el máximo progreso genético se obtiene cuando los animales se seleccionan en las mismas condiciones en las que va a vivir su descendencia, por tanto considera que la importación de animales es contraproducente, ya que la adaptación va de la mano con la reproducción.

Destaca las razas criollas por su fertilidad, especialmente en zonas cálidas húmedas, donde el cebú adaptado al trópico seco no lo hace del todo bien.

También se refiere al vigor híbrido y dice que Colombia debe promover el uso masivo del cruzamiento, ya que permite complementar las características más favorables de dos o más razas, y advierte que entre más razas se utilicen y más distantes sean, más vigor híbrido se retiene.

Entre más grandes, menos

También se refiere al tamaño del animal. Los animales de gran tamaño tienen pubertad más tardía y, en general, menor fertilidad.

Mott (1973) y Molinuevo (2003) concluyeron que, en pastoreo, la máxima producción por unidad de área se obtiene con animales de tamaño medio y alta fertilidad.

La raza holstein seleccionada en Norteamérica, de gran tamaño, desarrollada para maximizar su producción a base de alimentos concentrados, no es la más adecuada para los sistemas pastoriles, como sí lo puede ser en Nueva Zelanda, que es de tamaño medio, de menor producción de leche, pero de alta fertilidad. En cuanto a la producción de leche, señala que existe un antagonismo entre producción de leche y reproducción.

Una vaca de alta producción no llena los requerimientos nutricionales y ve afectada su reproducción.

En Norteamérica la raza holstein, seleccionada por gran tamaño y alta producción, ha perdido 10% de fertilidad, además de vigor y salud que afectan su longevidad. Se recomienda tener en cuenta el fenotipo.

 

 

Fuente: El Meridiano

Reproducción