La nación asiática importó 1,435 toneladas de carne de vaca brasileña en el 2011, un 0.3% de sus importaciones totales de carne bovina.
Japón afirma que detuvo sus importaciones de carne desde Brasil después de que el país sudamericano notificó a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE, por su sigla en inglés) del hallazgo de la proteína que se cree que provoca la encefalopatía espongiforme bovina, o enfermedad de las vacas locas.
Funcionarios brasileños afirmaron que el animal que murió en Paraná en diciembre del 2010 no tenía la dolencia.
Japón importó 1,435 toneladas de carne de vaca brasileña en el 2011, un 0.3% de sus importaciones totales de carne bovina, mostraron datos del Ministerio de Agricultura de Japón.
La OIE ha mantenido el estatus de Brasil como país con un riesgo insignificante de encefalopatía espongiforme bovina, dijeron funcionarios brasileños, que agregaron que Brasil recurrirá a acciones legales, si fuera necesario, contra cualquier importador que intente explotar afirmaciones sobre la enfermedad para bloquear la internación de carne de vaca brasileña.
El brote de la enfermedad de las vacas locas en Europa, Norteamérica y Japón en la década pasada a menudo llevó a importadores de carne bovina a embargar envíos y provocó un caos temporal en la industria. Brasil es el mayor exportador mundial de carne de vaca.
Los resultados de pruebas realizadas en Inglaterra este mes en busca de encefalopatía espongiforme bovina en tejidos de la vaca brasileña confirmaron la presencia de la proteína, llamada un prión, afirmaron el viernes funcionarios brasileños.
Agregaron que la proteína probablemente apareció tras una mutación genética espontánea en el animal de 13 años.
Pero los resultados sugirieron que es improbable que la vaca hubiera desarrollado la enfermedad si no hubiera muerto por otras causas, dijo el Ministerio de Agricultura de Brasil, que agregó que la simple presencia de la proteína es considerada un caso atípico de encefalopatía espongiforme bovina.