Dr. Alfredo Delgado
MV MSc Fac. de Medicina Veterinaria Univ. Nac. Mayor de San Marcos y Presidente de la Sociedad Peruana de Buiatría
El correcto funcionamiento de una máquina de ordeño, tiene una relación tanto o más estrecha que la que físicamente guarda con la glándula mamaria de la vaca lechera, de ahí que llame la poca atención que el ganadero tiene con sus unidades de ordeño, en lo referente a la instalación y mantenimiento. Si se tiene en cuenta que son máquinas que están dos y en otras tres veces al día trabajando en el ordeño, son máquinas que están en permanente contacto con la ubre de las vacas, de manera que en la medida que funcione mal o bien, se darán casos de mastitis en las vacas, sean estas de índole clínico o subclínico.
Debe quedar claro que las máquinas de ordeño de reciente fabricación e instalación han mejorado sustancialmente en lo referente a concepción y diseño, y esto evidentemente permite un mejor uso y por tanto mejora sustancial en lo que a sanidad de la ubre se refiere, condición que se traduce en mayor volumen de leche y mejor calidad del producto.
1.- Bomba de vacío: Es la que genera el vacío en la máquina, debemos recordar en este punto que en el ordeño la leche fluye de una zona de mayor presión a una zona de menor presión. Una bomba de vacío es la que extrae el aire existente dentro del sistema, para que este permanezca en presión negativa, y así pueda hacer que la leche fluya de la ubre hacia afuera. Las bombas de vacío generan ésta, por flujo de aire desde el sistema hacia el exterior. En términos generales una bomba de vacío genera 10 pies cúbicos por minuto (CFM) por cada HP de potencia que tenga, esto permitirá prever la capacidad necesaria para una sala de ordeño.
En este punto cabe señalar que pocos profesionales y ganaderos conocen los principios básicos del funcionamiento de la bomba de vacío, incluso personas que brindan servicio de mantenimiento de este importante medio de ayuda en la producción de leche, no tiene el entrenamiento debido en materia de máquinas de ordeño, y esto hace que su imagen vaya en deterioro, de manera que el ganadero ha «probado» con uno u otro sin resultado satisfactorio.
2.- Tanque de distribución: Es un dispositivo en donde el vacío se «acumula», generalmente lo encontramos por debajo de la bomba de vacío, y muchas veces se le conoce como trampa o reserva de vacío. Su función es la de mantener un nivel de vacío más o menos constante, es el que tiende a equilibrar cuando hay fluctuaciones de vacío.
Debe recordarse que muchas máquinas tienen un tanque de distribución reducida para el trabajo que realizan, y recientemente en un establo lechero se indicó la construcción de un tanque adicional de 200 litros de capacidad, esto más la inclusión de tubería de grueso calibre (4″ de diámetro), nos ha permitido mejorar sustancialmente el manejo de la mastitis bovina, debido a que las fluctuaciones de vacío se reducen sustancialmente.
3.- Línea de vacío de leche: Es la línea a la que se conecta las mangueras de leche sea que esta vaya a un balde o a una línea que llevará la leche al tanque de recepción. Recalco en todo establo que visito, que tanto el calibre, como la ligera pendiente que debe tener esta línea hacia el tanque de recepción es fundamental, ya que de lo contrario se crea turbulencia en el flujo de la leche y esto significa mayor consumo de vacío, lo que puede tener repercusión en la garra o pezonera.
4.- Línea de vacío de pulsadores: Es la línea a la que se conectan los pulsadores. Es recomendable que esta línea sea independiente de la línea de leche, esto ayuda sustancialmente a mantener estabilidad de vacío en el sistema.
5.- Manómetro: Artefacto que va en la línea de pulsadores, y que indica el nivel de vacío del sistema, debemos recordar que es sólo indicador aproximado del nivel real de vacío.
6.- Regulador: Es un dispositivo calibrado que se encarga de la admisión de aire hacia el sistema, es el encargado de equilibrar con presión positiva, para que el sistema no se mantenga en presión negativa constante, si no fuera por el regulador no habría las alternancias entre presión positiva y negativa, para un correcto funcionamiento de una máquina de ordeño.
Este dispositivo que en algunos casos trabaja con un sensor o simplemente tiene regulación neumática, es el encargado de que la bomba de vacío no haga que colapse el sistema de tuberías, ya que a un nivel de vacío extremo, deja entrar aire y si este vacío está cayendo, se cierra, por lo mismo dejar al aire, pero sin descuidar la limpieza es garantía de buen funcionamiento de la máquina.
7.- Los pulsadores: Son dispositivos que también admiten aire hacia el sistema, necesarios en las diferentes fases del ordeño, es el encargado de admisión de aire para la fase de descanso de las pezoneras. Además son indicadores del ritmo que lleva la maquina durante el ordeño. Los pulsadores pueden ser eléctricos o neumáticos, siendo mejores los primeros.
8.- Recipiente o tanque de recepción de leche: Dispositivo en donde se recibe la leche cuando esta fluye en un sistema cerrado de línea de leche, está sujeto a las variaciones de vacío. Las salas que trabajan con balde o porongos, evidentemente carecen de este dispositivo, en sí los baldes hacen de tanque de recepción.
9.- Trampa sanitaria: Dispositivo de desfogue para el tanque de recepción.
10.- Unidades de ordeño: Son las que se colocan a los pezones para la correcta extracción de la leche.
La bomba de vacío es la encargada de crear la presión negativa hasta niveles de 45 a 50 Kpa, dependiendo del tipo de máquina de ordeño, cuando el nivel de vacío sobrepasa estos límites, el regulador es el que admite aire y estabiliza el nivel de vacío en el sistema, si el nivel de vacío tiende a caer el regulador cierra las válvulas y de este abrir y cerrar de válvulas, se tiene el vacío uniforme para un buen ordeño.
Debemos recordar que además hay ingreso de aire normal, por las unidades de ordeño y los pulsadores, durante el ordeño, de manera que esa es la razón por la cual la bomba trabaja permanentemente. Las variaciones en el nivel de vacío son perjudiciales para la glándula mamaria, así si el vacío es excesivo, entonces tiene repercusión en la glándula mamaria, pues ejerce una mayor presión a nivel de los pezones, y aquí puede causar desde una simple congestión, hasta edema, esto si sucediera por tiempos relativamente cortos, probablemente no tendría mayor repercusión en la salud de la ubre, pero esto va a ocurrir dos veces por día, 30 veces al mes y el tiempo que se demore en ser detectado y corregido.
Por otro lado la fluctuación de vacío en una garra o unidad, probablemente no sea causante potencia o real de mastitis es la vaca que sufre esta alteración, sino en otra vaca, ya que se crea presión positiva, lo que facilita el reflujo de leche al interior de la glándula mamaria. De otro lado, si el vacío es insuficiente, las pezoneras tienden a no prenderse bien, generando los típicos ruidos de una máquina con bajo nivel de vacío, que aspira aire, esto genera sub-ordeño, y genera cambio en las presiones a nivel de pezoneras, permitiendo que haya reflujo de leche desde pezoneras hacia la glándula mamaria, y esto es un alto factor de riesgo para la salud de la glándula mamaria.
Algo que está fuera de los programas de evaluación de máquinas de ordeño, es lo relacionado a las pezoneras, bien se sabe que deben ser usados entre 2,500 a 4,000 ordeños. Resulta que cuando visito un establo y revisó la máquina de ordeño, lo primero que hago es pasar el dedo medio por el interior de las pezoneras, y es francamente sorprendente encontrar pezoneras ásperas qué parecen lija, a estas alturas estos artefactos que debieran ser cambiados, causan mucho daño en la glándula mamaria, generando mastitis.