El presidente de Bolivia, Evo Morales, inauguró hoy la primer planta textil, de propiedad estatal, para la transformación de lana de llama y alpaca en hilo, fibra y otros derivados textiles, y que forma parte de la empresa pública Yacana.
La producción de esta planta textil, ubicada en Laja, en el departamento de La Paz, servirá «no solamente para atender la demanda interna sino para exportar nuestros productos», anunció Morales durante la inauguración.
«Antes se importaba hilos del Perú. Ahora vamos a tener la capacidad de exportar», explicó el gobernante boliviano.
Esta planta, de propiedad pública y dependiente del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, se concibe en la mentalidad del gobierno de «añadir valor agregado a los recursos naturales», como indicó Morales.
El ministro de Desarrollo Productivo, Eugenio Rojas, indicó que en los seis departamentos de Bolivia en los que se crían camélidos hay alrededor de 3,3 millones de llamas y alpacas.
La llama se usa sobre todo para el consumo de su carne y la producción de charque (carne deshidratada) y, según dijo Rojas, la fibra no se ha trabajado aún mucho porque no existía una planta industrial de producción.
La empresa Yacana se creó mediante un decreto supremo de 2016 para el «aprovisionamiento de materia prima, producción, industrialización y comercialización de productos» procedentes de camélidos con un capital inicial de casi 38 millones de dólares.
Se espera que la planta beneficie a 15.000 familias bolivianas que se dedican a la ganadería de camélidos en la zona altiplánica.
Bolivia hizo una petición a finales del año pasado para que la ONU declare 2018 el Año Internacional de los Camélidos, como hizo en 2013 con la quinua, para promocionar sus productos.