Banco Universitario de Germoplasma Bovino Incrementa la Productividad Ganadera en Colombia

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Gracias a los bancos de germoplasma bovino de la Universidad Nacional de Colombia, ganaderos del departamento de Antioquia (nor-oeste de Colombia) de pocos recursos optimizaron la productividad de sus hatos. Hoy pueden acceder a esperma de origen certificado a costos asequibles. Es el resultado de un trabajo investigativo de treinta años.

Más competitividad y mejor producción ganadera han obtenido unos 800 campesinos de Antioquia – Colombia, al mejorar la genética de sus bovinos. Todo gracias al proyecto de Bancos de Germoplasma que la Universidad Nacional de Colombia (UN) desarrolla desde hace treinta años y que hoy se puso al servicio de la comunidad.

En el país, el 50% de los ganaderos son de mediano y pequeño tiraje. Es decir, ejecutan su producción casi artesanalmente, sin acceso a ayudas tecnológicas y con lo mínimo para sostener a sus familias y proveerse de lo necesario. Es una industria todavía atrasada, a diferencia de los países europeos y algunos latinoamericanos.

Parte de la solución surgió en el Laboratorio para el Procesamiento de Semen Bovino de la UN en la ciudad de Medellín. Allí se aplican conocimientos científicos para adquirir mejores carnes, lácteos y crías. El objetivo es obtener una cadena reproductiva de excelencia en los hatos colombianos, sin importar su tamaño.

Según el director técnico del Laboratorio, Ómar Camargo, el proceso consiste en evaluar que toros cuidadosamente seleccionados cumplan tres requisitos importantes:

1) calidad genética (contextura física, calidad del esperma y potencial lechero);

2) estar libres de enfermedades como la leptospirosis (producida por la bacteria Leptospira interrogans), así como de síntomas de infertilidad y aborto o parasitosis gastrointestinal, entre otras; y

3) cumplir con las exigencias del sector, que demanda principalmente las razas holstein y jersey (representan el 50% de las más solicitadas).

Estas características influyen en el resultado del producto final: aumento de la producción, del porcentaje de grasa y proteínas –pueden incrementar entre el 3% y el 4% el valor nutricional– y de la confianza alimentaria, por cuanto el ganado es sometido a exámenes avalados por el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA). Además, beneficia al 50% de finqueros, que no tienen la posibilidad de desarrollar tales procesos.

A partir de las investigaciones de la UN, los ganaderos fueron clasificados en tres grupos: los de grado 1, aquellos sin desarrollo tecnológico, infraestructura, plan nutricional ni ningún tipo de manejo técnico; los de grado 2, los que cuentan con algún tipo de programa de inseminación artificial para mejorar su ganado; y los de grado 3, la mitad privilegiada que obtiene grandes utilidades y está a la vanguardia tecnológica. Los dos primeros son la prioridad del programa.

Bancos de Germoplasma

La leche producida en Colombia contiene niveles muy bajos de proteína comparada con la de países como Holanda, Nueva Zelanda y otros ubicados en condiciones climáticas de trópico alto (temperaturas bajas entre los 10 °C y los 15 °C), excepcionales para la ganadería de alta calidad. Además, no se cuenta con tecnologías de manejo agropecuario que consoliden una ventaja en cuanto a la genética de los bovinos. Por estos motivos, se hace necesario recurrir a la inseminación artificial con semen de ejemplares vacunos de origen extranjero, para así suplir la necesidad que hay en el ámbito local.

Es aquí donde entra el equipo de investigación de la UN. Ellos ingresan el ganado holstein y jersey al laboratorio para determinar sus cualidades zootécnicas y diferenciales frente a otros ejemplares. Asimismo, establecen si la genética es óptima como para almacenar su esperma, el cual puede conservarse por unos veinte años.

Para el proceso, se utiliza una vagina artificial que simula el aparato genital de la vaca y permite extraer el semen del toro. Luego se evalúan sus características de concentración, densidad y calidad, para, finalmente, conservarlo intacto –sin alterar ni envejecer su metabolismo– a 200 °C bajo cero en nitrógeno líquido.

El director técnico del Laboratorio dice que la Universidad busca el fomento agropecuario al servicio comunitario, pues una pajilla de dosis para inseminar procesada en la UN vale unos 9 mil pesos, mientras que una canadiense u holandesa puede costar 100 mil, lo que es insostenible para los ganaderos grado 1 y 2.

Además, cada pajilla o dosis a la venta contiene medio centímetro de esperma, que es la cantidad suficiente para inseminar a una vaca. Sin embargo, un toro de origen certificado puede secretar hasta 212 dosis de semen libre de enfermedades y con la probabilidad de fecundar a esa misma cantidad de hembras.

200% más de producción 

A partir de esta experiencia, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de Antioquia ejecutó un proyecto con la UN que tuvo resultados positivos en 420 fincas de la región. La iniciativa buscaba consolidar la actividad de bancos de germoplasma y su impacto en los futuros bovinos, a partir de análisis microbiológicos de sus cualidades de vitalidad y producción de insumos ganaderos (leche, queso, carne).

Libardo Castrillón Benjumea, profesional de la Secretaría, destaca que, habida cuenta de la carencia que se presenta en estas zonas, la propuesta “pretendió establecer un mejoramiento de cualquiera de sus índices, ya sea de productividad, reproductividad, producción de leches y crías”. Por ejemplo, el llamado toro veredal es el utilizado para preñar las vacas de todas las fincas cercanas, pero este no tiene las cualidades genéticas para transmitir lo mejor a las nuevas generaciones bovinas.

El funcionario asegura que, luego del proceso tecnológico, unos 800 ganaderos de 42 municipios de Antioquia aumentaron ostensiblemente su producción: hasta en un 200% en indicadores como peso de las crías, obtención láctea y precios para la venta de las crías, entre otros. Y esto ha mejorado en cantidad y calidad las condiciones económicas de sustento de las familias rurales.

Por ejemplo, una novilla de 200 kg, en condiciones normales, puede costar 700 mil pesos, mientras que una cría con genes cruzados o mejorados y ese mismo peso puede valer el doble.Además, el proyecto es una herramienta para competir y mantener recursos propios, dado que los tratados de libre comercio con Europa y Estados Unidos, de alguna manera, ponen al país en cierta desventaja. Este es un ejemplo del trabajo académico y científico en beneficio del sector agropecuario de Colombia.

Fuente: Agencias

 

Mejoramiento GenéticoProyecto Ganadero
Comments ( 1 )
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  • Rodrigo Celis

    Me interesa averiguar programa mejoramiento de praderas y transferencia de embriones en ganado bovino clima templado.