Mel DeJarnette, Especialista en reproducción
EI éxito de cualquier programa de inseminación artificial depende de un sinnúmero de factores. El éxito comienza con un toro que sea sano, libre de enfermedades, y que produzca grandes cantidades de semen de alta calidad. Pero, de igual importancia es Ia fertilidad potencial de Ia vaca, Ia eficiencia del inseminador, y la calidad del ambiente. Cada uno de estos componentes debe mantenerse a sus más altos valores puesto que el lograr una alta eficiencia reproductiva estará en dependencia del componente más débil.
EL TORO
Desde hace mucho se ha reconocido que uno de los mayores beneficios de Ia inseminación artificial (IA) es el reducido riesgo de transmisión de enfermedades. Pero, Ia IA puede ser un medio
muy eficiente de transmitir enfermedades si no se pone atención a Ia salud de los toros donantes de semen. Las mayores centrales de IA que son miembros del Servicios de Certificación de Semen (CSS) se esmeran en asegurar que cada dosis de semen esté libre de enfermedades. EI toro promedio en una de estas centrales de IA puede recibir más de 30 pruebas sanitarias en el año en el control de más de 12 enfermedades diferentes. Aunque el semen procesado en un centro que no sea miembro de CSS “puede ser” igualmente seguro, no hay garantías y el riesgo casi siempre será mucho mayor que si se usara semen de toros residentes en centrales aprobados por CSS.
Los toros suficientemente sanos como para ser donadores de semen, también deben producir semen de aceptable calidad “Es muy fácil detallar 60 a 80 razones diferentes que pueden afectar el éxito de una determinada inseminación, muchos de ellos ocurrieron varios meses antes de Ia fecha de inseminación. Los gerentes más exitosos reconocen que cada dia debe ser usado para preparar Ia vaca para una mayor fertilidad en el futuro.” para lograr niveles normales de concepción. Los toros residentes en Ias mayores centrales de IA pasan por críticos escrutinios de calidad de semen en cada colección, usando Ia más alta tecnología disponible para Ia evaluación de semen. Los eyaculados de calidad inferior son inmediatamente descartados. Los toros que continúan produciendo eyaculados de baja calidad, quizás debido a enfermedades o condiciones climáticas adversas, pueden ser temporalmente removidos del programa de colección. Algunos toros simplemente son descartados del programa.
Estos procedimientos aseguran que solo el semen de alta fertilidad es el que sale al mercado. Como resultado de estos procedimientos de control de calidad del semen, Ia variación en Ia tasa de concepción entre toros es extremadamente pequeña. A como ha sido estimado tanto por Agritech Analytics y el Laboratorio de Programas de Mejora Animal del Departamento
Los toros residentes en las mayores centrales de IA pasan por críticos escrutinios de calidad de semen en casa colección, usando la más alta tecnología disponible para la evaluación de semen.
El toro promedio en una de la mayores centrales de de IA pueden recibir más de 30 pruebas sanitarias en un año, mientras se controlan 12 o más enfermedades
de Agricultura de los Estados Unidos (USDAAIPL), más del 90% de “todos” los toros en IA (toros probados e inactivos incluidos) tienen una desviación de fertilidad que es > -3% de la fertilidad promedia. Pero, cuando solo se considera Ia lista de toros ACTIVOS en IA, cuyo semen realmente esté disponible a Ia venta, más del 98% de los toros satisfacen este criterio.
Debido a Ia condición temporal tanto de Ia calidad del semen como del estado de salud de los toros, Ia IA siempre tendrá una ventaja sobre toros en monta natural. Aunque los exámenes andrológicos certifiquen que un toro esté apto para montar vacas, Ia calidad de su semen puede cambiar dramáticamente en un periodo de tiempo relativamente corto.
Las investigaciones han demostrado que una exposición de 48 horas a condiciones térmicas ligeramente estresantes puede afectar Ia calidad del semen por ocho semanas o más. La exposición de un toro a una hembra infectada puede cambiar su estado de salud permanentemente. Los toros en Ias centrales de IA aprobados por CSS, básicamente reciben un examen andrológico con cada colección de semen, que frecuentemente se realiza varias veces por semana. Sin importar su intensidad, ningún programa de manejo de toros de monta natural en Ia finca puede competir con Ias centrales de IA aprobadas por CSS en entregar semen de alta calidad y libre de enfermedades.
LA VACA
No importa que tan buena sea Ia calidad del semen, este no tiene efecto terapéutico para “curar” problemas de fertilidad en Ia vaca. Las vacas que sufren cualquier tipo de problema de salud están predispuestas a reducidas tasas de concepción.
Las vacas que sufren un problema de salud son más susceptibles a otros problemas sanitarios, lo cual aumenta el nivel de dificultad en preñarlas. Por ejemplo: Ias vacas afectadas por Fiebre de Leche tienen una mayor probabilidad de ser afectadas por Ketosis, Desplazamiento del Abomaso, Metritis, Mastitis y quistes ováricos, que aquellas que no fueron afectadas por Fiebre de Leche.
Cuando Ias vacas sufren problemas de salud o de reproducción, queremos encontrar una poción mágica que puede aplicarse y resolver el problema “hoy mismo”. Pero, Ia fertilidad de hoy es un reflejo del ambiente y manejo de Ia vaca durante los últimos 2 a 3 meses. De igual manera, Ias decisiones de manejo tomadas hoy pueden afectar Ia fertilidad de Ia vaca en los próximos 3 meses.
No hay un solo factor con una mayor incidencia sobre fertilidad que la nutrición.
No existe un solo factor que afecte Ia fertilidad de Ia vaca más que Ia nutrición. Además, probablemente no exista un período en el ciclo reproductivo de Ia vaca donde su nutrición es más descuidada que durante Ia última parte de su lactancia. La incidencia de problemas en Ia vaca recién parida es altamente dependiente de Ia calidad del programa de transición. La calidad del programa de transición depende fuertemente de Ia calidad de Ia vaca al momento del secado. En un hato bien manejado, Ias vacas entrarán y saldrán del programa de transición en una condición corporal entre 3.25 a 3.75. Cuando Ias vacas son secadas sub. o sobre acondicionadas, el programa nutricional debe ajustarse hacia arriba o abajo para tener a Ias vacas en Ia condición óptima antes de parir. El obligar a Ias vacas a cambiar su condición corporal durante el periodo seco, no es una buena idea. Un buen programa de nutrición y evaluación de Ia condición corporal durante el ciclo reproductivo de Ia vaca, es esencial para asegurar que durante cada etapa Ia vaca se prepara adecuadamente para moverse hacia Ia etapa siguiente.
Es crítico tener áreas para aislar animales enfermos o recién adquiridos del resto del hato.
EL INSEMINADOR
Cuando discutimos Ia eficacia del inseminador, normalmentenos enfocamos en temas como el manejo del semen y Ia técnica de IA. Pueden ellos sacar semen del termo sin dañar el semen que queda que queda en el termo? Pueden ellos descongelar el semen, cargar Ia pistola de IA y avanzar hasta Ia vaca con semen que aun esta vivo y viable? Y finalmente, pueden ellos eficientemente manipular Ia pistola a través de Ia Cervix y depositar el semen en el cuerpo uterino? Es cierto, cada uno de estos factores es importante, pero ninguno de los atributos de un buen inseminador es más importante que: Puede él identificar con precisión Ias vacas que están realmente en celo y listas para ser inseminadas? En muchos ranchos lecheros grandes de hoy, Ia filosofía es: “métale semen por si acaso.” Esta práctica no solamente es derrochadora, sino que también puede ser contraproducente. Las investigaciones han demostrado que vacas gestadas hace menos de 30 días tienen un 90% de probabilidad de abortar si son re-inseminadas por error. Muchos hatos pueden mejorar su tasa de concepción y preñez con solo ser más eficientes con su programa de diagnóstico de celos.
Los inseminadores deben ser capaces de identificar precisamente a las que realmente estén en celo.
El tiempo óptimo para inseminar es también un componente importante en Ia eficiencia del inseminador. No es suficiente solamente poner semen en una vaca que está en celo. El tiempo de Ia inseminación debe asegurar que haya sincronía entre Ia vida útil del semen y Ia del óvulo. El semen descongelado vive aproximadamente 20 a 24 horas en el tracto reproductor femenino, pero, Ia vida útil del óvulo no fertilizado es de solo seis a ocho horas después de ovulado. Puesto que Ia ovulación ocurre entre 25 a 32 horas después que Ia vaca se deja montar por primera vez, el tiempo ideal de inseminación es de 4 a 14 horas después. Pero, es importante distinguir entre “primera vez que se deja montar” y “primera vez que le vimos dejarse montar”. En Ia mayoría de los ranchos lecheros grandes de hoy, Ias vacas frecuentemente son entrampadas para IA una vez por día, lo cual disminuye Ia oportunidad de inseminar “al momento ideal”. Los programas de IA que inseminan solo una vez por día deben aceptar que muchas vacas van a ser inseminadas muy temprano y estas deben re-inseminarse si pasan en celo mucho tiempo después.
La higiene es un atributo frecuentemente menospreciado por un inseminador EI mantener Ia integridad higiénica del útero es un factor importante en el logro de una preñez. Cosas pequeñas como manos limpias, toallas de papel limpias, equipo limpio y el uso de doble funda pueden a Ia larga hacer una significativa diferencia.
EL AMBIENTE
EI ambiente es el principal influyente en Ia probabilidad de una concepción. EI estrés térmico es uno de los principales factores del ambiente. EI diseño de Ia infraestructura y el uso estratégico de abanicos y atomizadores de agua son esenciales para mantener aceptables tasas de concepción durante los meses cálidos del verano. Siempre debe haber agua limpia y fresca en todos los corrales y antesalas.
La exposición a enfermedades ambientales puede impactar dramáticamente el desempeño reproductivo. Muchos son los hatos que han descubierto que los programas de vacunación son solo pólizas de seguros pero de ninguna manera son una garantía. Trabaje con el veterinario para establecer un programa rutinario de salud. Las vacunas deben ser combinadas con un buen programa de monitoreo y pruebas de enfermedades.
La higiene es un atributo subestimado de la eficiencia de un inseminador.
Las pruebas son especialmente importantes en casos de muertes y abortos. Se debe vigilar constantemente que no ingresen al hato animales infectados del virus de Ia Diarrea Viral Bovina (BVDV). Es crítico tener un sitio donde se pueda aislar animales recién adquiridos y/o enfermos del resto del hato. El evitar que Ias vacas sean expuestas a animales salvajes ya algunas especies domésticas, reduce Ia oportunidad de contagio de algunas enfermedades. Algunos animales cuya presencia en el rancho debe evitarse y/o controlarse son los venados, mapaches y caninos.
La nutrición no solo afecta a Ia vaca en términos de balance energético y condición corporal, sino también en términos del funcionamiento del sistema inmunológico. Un buen programa nutricional puede apoyar a los mecanismos de defensa de Ia vaca aun cuando esté expuesta a alguna enfermedad. Por otro lado, un programa nutricional deficiente puede comprometer Ia inmunidad del hato al punto que Ia presentación de enfermedades pueda ocurrir aún en situaciones de bajos niveles de exposición.
Algunos alimentos también sirven como potencial fuente de toxinas. Los productos a base de semilla de algodón con altos niveles de Gosipol pueden afectar negativamente Ia reproducción. Las mico toxinas son una constante amenaza ambiental y sus efectos van desde muy leves a altamente extremos. Es muy difícil distinguir entre efectos directos e indirectos de Ias toxinas que pueden ser debidos a una reducida ingesta de materia seca. En Ia medida que los productores exploran fuentes alter nativas de alimentos y subproductos en un esfuerzo de controlar los crecientes costes de los alimentos, Ia nutrición continuará siendo uno de los principales retos ambientales para un óptimo desempeño reproductivo.
La comodidad de Ias vacas es otro importante componente ambiental en Ia ecuación de fertilidad. Las vacas definitiva mente tienen que estar cómodas frente al comedero ya Ia sombra; los abanicos y atomizadores son extremadamente importantes para este fin. Hay que prestar especial atención al tamaño de Ias galeras y Ia frecuencia del cambio de Ia cama.
Durante los meses cálidos y húmedos los abanicos y los atomizadores proveen comodidad adicional.
Los Pasillos de concreto deben ser ranurados para evitar que los animales resbalen.
En echaderos comunales de tierra, hay que proveer montículos y drenaje adecuados. Los pasillos de concreto deben ser ranurados para evitar que los animales resbalen, y deben estar libres de piedras para evitar lesiones de Ia pezuña. Siempre que sea posible se debe considerar el uso de alfombras de gomas.
Las investigaciones siguen aportando pruebas del efecto negativo de Ia mastitis sobre Ia eficiencia reproductiva. Aún no está claro si Ia mastitis directamente afecta Ia reproducción o simplemente es un barómetro de Ia salud del hato y su competencia inmunológica. Cualquiera que sea el caso, el manejar el ambiente de Ia vaca para reducir mastitis repercutirá en una mejoría en el desempeño reproductivo del hato.
RESUMEN
Es muy fácil detallar 60 a 80 raz6nes diferentes que pueden afectar el éxito de una determinada inseminación, muchos de ellos ocurrieron varios meses antes de Ia fecha de inseminación.
Los gerentes más exitosos reconocen que cada día debe ser usado para preparar Ia vaca para una mayor fertilidad en el futuro. El componente más fácil de controlar en Ia cadena de Ia fertilidad es Ia calidad del semen. Solo se debe comprar semen de centros de IA de buena reputación, aprobados por CSS, y asegurarse que los inseminadores estén adecuadamente entrena dos. El programa de detección de celos debe minimizar el número de vacas que sin estar en celo son presentadas a ser inseminadas. Trabaje en conjunto con el veterinario, el nutricionista y el especialista en Soluciones Reproductivas de Select Sires para establecer un programa comprensivo de manejo de hato que asegure que todos los componentes de Ia cadena de fertilidad estén considerados.