LISTERIOSIS
La listeriosis es causada por Listeria monocytogenes, presente en el medio ambiente. Se estima que su reservorio principal es el ensilaje.
También se puede aislar de la gallinaza y de las heces de animales sanos.
Se trata de una bacteria Gram-positiva muy resistente a las condiciones adversas del medio ambiente, pudiendo sobrevivir mucho tiempo en el suelo, el agua y alimentos contaminados.
Es un germen patógeno microaerófilo, intracelular facultativo, bastante resistente a los antibióticos, que se reproduce bien en refrigeración.
L. monocytogenes puede ser responsable de varios síndromes, como aborto, mastitis y septicemia [ver listeriosis septicémica en este manual (Cap. 2, MGL 5)], que no suelen acompañar al más importante síndrome encefálico.
Existe un elevado riesgo zoonótico porque puede estar presente en la leche.
El síndrome encefálico se caracteriza por la afectación del nervio trigémino, del núcleo del trigémino y del tronco encefálico. Se cree que el germen llega al trigémino a través de pequeñas lesiones en las mucosas de la cavidad oral.
Los signos clínicos de la listeriosis encefálica derivan de un compromiso unilateral de los nervios craneales, como el Trigémino, el Facial, el Sistema Vestibular y otros, y sus núcleos.