Funcionarios de la Municipalidad Provincial de Contumazá y personal del matadero municipal recibieron una inducción sobre inocuidad agroalimentaria a cargo de los especialistas del Servicio Nacional de Sanidad Agraria – Senasa.
Contumazá, provincia cajamarquina, solo cuenta con el matadero municipal como único centro formal para el faenado de animales de abasto, en el cual se han identificado varias falencias que podrían repercutir en la inocuidad de las carnes.
Para contrarrestar los riesgos hacia la salud pública, el Senasa orientó la inducción a explicar la implicancia sanitaria y económica que conlleva un animal sacrificado, transportado y comercializado en condiciones no adecuadas.
También se orientó sobre las sanciones monetarias por incumplimiento de la norma (D.S. 015-2012), donde se regula y especifica cómo debe funcionar un matadero.
El decreto busca salvaguardar la inocuidad de los alimentos cárnicos, el cual es la garantía de que un alimento está libre de contaminantes y que no va a causar daño tras su preparación o consumo.
Los agentes contaminantes se clasifican en físicos (cabellos, uñas, etc.), biológicos (bacterias, virus, hongos) y químicos (antibióticos, plaguicidas metales).
Por su parte, el gerente de Desarrollo Económico de Contumazá anunció que está en la agenda municipal ejecutar mejoras en la infraestructura del matadero y elaborar una ordenanza municipal para regular el tránsito y comercialización de carnes en la provincia.
La jornada se desarrolló en vísperas del Día Mundial de la Inocuidad Alimentaria, proclamado en octubre del 2018 por la ONU y que se celebró por primera vez el 7 de junio.
El Senasa ha anunciado un curso ‘Calidad sanitaria e inocuidad de alimentos primarios y bebidas de consumo humano’, para el próximo 11 de junio en las instalaciones del Senasa ubicado en el distrito Baños del Inca.