El Servicio Nacional en Sanidad Agraria – Senasa inició el monitoreo serológico en ganado bovino de hatos para la producción de carne y leche no inscritos en el programa oficial de control, para evaluar la prevalencia anual de Brucelosis bovina en la región Cajamarca e implementar medidas preventivas y de control de la enfermedad.
La primera colecta de suero sanguínea se ejecutó en un fundo lechero de Tartar Grande, caserío del distrito Baños del Inca, donde se recogió 59 muestras de un total de 960 proyectadas a colectar en la región.
Las muestras que colectan los servidores del campo son analizadas mediante la prueba Rosa de Bengala y ELISA Competitiva, en el laboratorio oficial del Senasa, para determinar la presencia o ausencia de anticuerpos de Brucella abortus.
Ante casos positivos a la enfermedad, se realiza el seguimiento, evaluación epidemiológica y muestreo del resto de animales expuestos en el predio y predios aledaños, implementándose las medidas sanitarias establecidas en la normativa vigente (D.S. 033-2000-AG), que aprueba el Reglamento para el Control y Erradicación de Brucelosis bovina.
La Brucelosis bovina es una enfermedad infecciosa que se extiende a nivel mundial e implica una gran importancia sanitaria con repercusión en la economía de las familias productoras. El impacto económico se debe a la reducción de la fertilidad de los animales, abortos o nacimientos de terneros débiles y al sacrificio de los animales enfermos.
Es una enfermedad que puede transmitirse al ser humano mediante el consumo de leche o productos lácteos sin pasteurización, manipulación de fetos abortados y placentas de animales enfermos, que desencadenan en fiebre ondulante, lesiones óseas articulares y meningitis.
Por ello, es necesario notificar la sospecha de ocurrencia de ésta o cualquier enfermedad poco comunes para un diagnóstico oportuno.
Vigilancia Sanitaria
Como parte de la vigilancia sanitaria de hatos ganaderos, el Senasa desarrolla, paralelamente al monitoreo preventivo, el programa anual de muestreo en hatos de cuencas lecheras en las provincias Cutervo, Chota, Hualgayoc, San Miguel, San Marcos, Cajabamba y Celendín, además de Cajamarca. La meta programada es la evaluación de 12 mil animales.